¿Estás intentando adelgazar? ¿Te estás cuidado con la dieta pero todavía no llegas a los resultados que deseas? Una de las mejores formas de bajar de peso es correr. Esta es una forma realmente eficaz de quemar calorías y de perder esos kilos que tanto nos molestan. Por lo tanto, conozcamos cómo podemos empezar a adelgazar corriendo.
La única forma de perder peso es la de quemar más calorías que la que las consumimos (para perder medio kilo debemos quemar unas 3600 calorías). Para eso debemos comenzar llevando una buena dieta y combinándola con ejercicio regular. En primer lugar escoge porciones pequeñas de aquellos alimentos altos en calorías y consume más granos enteros, frutas y verduras. Cuídate con las comidas: compensar las calorías quemadas consumiendo más calorías en los alimentos sería un error.
Todas estas actividades están bien y nos ayudan a quemar grasas, pero si además aplicas las reglas que te contamos aquí, puedes perder peso de forma más rápida. De todos los tipos de ejercicio posible, la carrera es la que te ayudará a recuperar la figura en un menor plazo de tiempo.
Es importante variar los entrenamientos, que el cuerpo no se acostumbre ni a una distancia determinada ni a un ritmo especifico; perderíamos la capacidad de sorprender al cuerpo, le acostumbraríamos a trabajar en una zona de esfuerzo en la que se encontrase cómodo y por tanto el ejercicio sería menos efectivo. Es necesario variar ritmos, distancias e intensidades. Cuando sales de la zona de confort, el cuerpo necesita quemar más calorías por kilometro recorrido. Además, cuando haces entrenamiento por intervalos, aceleras tu metabolismo, haciendo que el cuerpo siga quemando calorías durante horas, incluso después de haber acabado el entrenamiento.
Este tipo de entrenamiento es indicado para personas que corren y hacen ejercicio o deporte habitualmente y que tienen un mínimo estado de forma. Dependiendo de la constitución de cada uno, de cuántos kilos nos sobren y de cómo acometamos el ejercicio, podremos perder semanalmente de uno a dos kilos, si seguimos las siguientes reglas. Te presentamos el entrenamiento de carrera por intervalos oFartlek, que consiste en alternar ritmos a diferente velocidad, sin interrupción.
1. Breve pero intenso
El entrenamiento debe durar entre 10 y 40 minutos. Si superamos los 40 minutos, no podemos considerar el ejercicio como entrenamiento de intervalos, sino como ejercicio aeróbico, e independientemente del ritmo continuo al que entrenes, estás haciendo un ejercicio que quema grasas, pero de una forma más lenta.
2. Los intervalos
Debes de comenzar los intervalos con el tramo lento, a un ritmo sobre el 50% de tu FCM (frecuencia cardiaca máxima) y durante aproximadamente un minuto, para seguidamente realizar el intervalo más duro durante otros 30 segundos, corriendo como si te persiguiera un perro.
Aunque para calcular tu FCM, una sencilla formula, nos dice que restemos a 220 nuestra edad, es conveniente hacerlo mediante el siguiente test: Calienta 15 minutos. Localiza una cuesta larga y de buena pendiente que tardes en subir al menos 2 minutos. Sube 3 veces, las 2 primeras a ritmos alto y la tercera todo lo rápido que puedas, manteniendo los últimos 30 segundos a tope. Alcanzarás tu FCM.
3. Ritmos
El intervalo fuerte debe de realizarse a una intensidad tal, que si tuviéramos una escala de 1 a 10, siendo 10 la parte más dura, deberías de correr siempre por encima de 6,5, hasta acercarse lo máximo posible a 10.
Para los intervalos lentos, en la misma escala del 1 al 10, debes de correr a un ritmo aproximado de entre 3 y 4, que te permita recuperarte.
4. Frecuencia
El entrenamiento en intervalos debe hacerse 3 días por semana. Tu cuerpo te habla, escúchale. Si te pide salir algún día más a entrenar, es que probablemente no estás siendo todo lo exigente que deberías ser en los intervalos rápidos. Si por el contrario, te resulta duro salir esos 3 días en semana, es que estás realizando unos intervalos muy duros o durante más tiempo del recomendable.
5. Mejor al final
Realiza el entrenamiento por intervalos como la última actividad de tu rutina diaria. Si haces otras actividades, como ejercicios de fuerza o de musculatura, deja la carrera por intervalos como último ejercicio, así quemarás grasa más eficientemente y no interferirás en la efectividad de tu trabajo con pesas o de fuerza.