Como todos sabréis, el calcio es vital para que nuestra salud, principalmente la de nuestros huesos, sea óptima. También es muy importante para prevenir diversas enfermedades, como por ejemplo la osteoporosis, una de las más temidas, más que nada por las mujeres.
¿Qué es el calcio? Es un mineral esencial para que el organismo funcione de forma adecuada. Es posible que cuando pienses en la fortaleza de tus huesos te olvides que tus dientes también lo son. De este modo, si consumes calcio de forma correcta, tendrás una dentadura mucho más fuerte. Debemos hacer referencia a otras funciones muy importantes de este componente, como lo es la de enviar los impulsos nerviosos al cerebro, así como para la coagulación de la sangre y en la regulación de los latidos del corazón.
La principal fuente de calcio se encuentra, por supuesto, en los alimentos. Una de las que todos sabemos que es rica en calcio es la leche, además de sus derivados. Otros de los alimentos que tienen una gran presencia de calcio en su composición son el tofu, las sardinas, los vegetales verdes, los frijoles o habichuelas y las almendras, solo por nombrar algunos.
Para saber si se está obteniendo la dosis adecuada de calcio, recientemente la Academia Nacional de Ciencias en Estados Unidos ha establecido recomendaciones, dependiendo de la edad de las personas. Es así que:
– Para quienes poseen entre 19 y 50 años, la dosis recomendada es de 1.000 miligramos al día.
– Personas que tienen más de 50 años deben consumir 1.200 miligramos de calcio al día.
– En el caso de las mujeres embarazadas y lactantes, la recomendación también es de 1.000 miligramos al día.
Por supuesto que las personas que tengan enfermedades o problemas particulares generados por la falta de calcio, deberán acudir a su médico y seguir lo que este aconseje. Aquí van algunos ejemplos de alimentos ricos en este mineral. Presta atención y tómalos de guía para tu dieta diaria:
– Una taza de leche evaporada sin grasa, 742 mgs. de calcio.
– Una taza de yogurt desgrasado con 10 gramos de proteína, 354 mgs. de calcio.
– 3 onzas (85 gramos) de sardinas enlatadas con hueso, 325 mgs. de calcio.
– Una taza de espinacas (cocinadas o congeladas) sin sal, 291 mgs. de calcio.
– Una taza de col o repollo (cocinada) sin sal, 190 mgs. de calcio.
– Una taza de frijol de soya o soja (cocinado) sin sal, 261 mgs. de calcio.
– Una taza de nabo (cocinado o congelado) sin sal, 249 mgs. de calcio.
– Una onza (28 gramos) de queso suizo tipo gruyere, 224 mgs. de calcio.
– Una onza (28 gramos) de queso muzarela, 207 mgs. de calcio.
Evita problemas de salud por deficiencia de calcio, sigue estos consejos y déjanos tus comentarios.