El café, esa bebida que nos acompaña cada desayuno y a la que todos recurrimos cuando necesitamos estar despiertos toda la noche para estudiar o trabajar, siempre ha sido objeto de críticas. Un día, la cafeína es buena por su poder antioxidante, pero al otro nos advierten que no debemos consumirla demasiado. ¿Debemos renunciar a nuestras tazas de café para cuidar nuestra salud? ¿O podremos seguir bebiéndolas tranquilamente?
Examinemos, entonces, los pros y contras del café para tener un panorama más claro. Por un lado, muchos estudios han demostrado que el consumo regular de cafeína nos ayuda a prevenir la enfermedad de Parkinson, protege nuestro organismo de los cálculos biliares y mejora nuestra concentración y estado de alerta. Por esta razón, nos ayuda a mantenernos despiertos y concentrados durante mucho más tiempo.
¿Por qué el café es bueno para nosotros?
Empecemos con las buenas cosas.
El café es extremadamente rico en antioxidantes, es bueno para aliviar los dolores de cabeza, mejorar el ánimo y reducir el de cirrosis, cáncer de hígado, diabetes tipo 2 y Parkinson.
“En general, las investigaciones muestran que el café es mucho más saludable que perjudicial”, dice Tomas DePaulis, un científico investigador en la Universidad de Vanderbilt del Instituto de Estudios del Café entrevistados por WebMD, que también añadió que “para la mayoría de la gente, pocas cosas malas bienen de beberlo, pero un montón de buenas “.
El café también contiene una sustancia antibacterial llamada trigonelline, que es responsable de su maravilloso sabor y puede también, créanlo o no, ayudar a prevenir las caries en los dientes. La cafeína también es un ingrediente importante, que la investigación ha demostrado, ayuda a prevenir o retrasar la aparición de cáncer, además de aliviar el dolor de cabeza, ayuda a combatir la fatiga y aumenta el rendimiento atlético.
Los estudios también han demostrado que el consumo regular de café recorta el riesgo de la enfermedad de Parkinson por un impresionante 80%, el riesgo de tener cálculos biliares en un 50% y el riesgo de cáncer de colon en un 25%.
Otra cosa interesante es que los estudios en cáncer de hígado y la diabetes han demostrado que no hay restricción en la cantidad de café con el fin de obtener la mayor parte de los beneficios asociados con la bebida ,en otras palabras, cuanto más bebamos, mejor.
Las cosas malas
Ahora llegamos a la parte negativa. En primer lugar, la cafeína es una droga y no puede reemplazar a una dieta saludable o a una buena noche de sueño. Como es el caso con cualquier medicamento, puede ser objeto de abusos. La tolerancia a la cafeína es diferente en cada uno de nosotros y todos debemos ser conscientes de que cantidad se puede ingerir antes de obtener el desagradable efecto secundario – que entre el nerviosismo, rápido latido del corazón, palpitaciones, insomnio e irritabilidad, y también más graves, a largo plazo efectos secundarios, como la osteoporosis o la presión sanguínea alta.
Otro efecto secundario de beber café está vinculado por entero a nuestro estilo de vida moderno y los ataques virulentos de la industria de la publicidad en nuestra percepción de lo que es saludable y qué no lo es. Este efecto secundario no es causado por el café en sí, sino más bien de nuestra elección para combinaciones con café con resultado de calorías extras, tales como crema batida, jarabe de sabor y la nata. Esas extras pueden convertir cero calorías de una taza de café a un exceso de 570 calorías por taza.
- El consumo excesivo de café aumenta el nerviosismo de la persona que lo consume. Así como:
- Produce dolor de cabeza.
- Aumenta el ritmo cardiaco así como palpitaciones y aumento de pulsaciones.
- Crea ansiedad en algunas ocasiones.
- Produce acidez estomacal.
- Produce un evento muy negativo en el sueño, por el nerviosismo que genera evita que se duerma plácidamente.
Otros beneficios del café que quizás no conoces es que mejora el estado de ánimo, mejora la resistencia física y hasta nos ayuda a evitar dolores de cabeza. De todas maneras, aquí no vale la regla de cuanto más, mejor: tan sólo una o dos tazas diarias alcanzan. Más no es necesariamente mejor.
Ahora que analizamos sus puntos positivos, es momento de conocer los contras del café. Si bien nos ayuda a mantenernos despietos cuando lo necesitamos, lo malo es que puede alterar nuestro sueño. Esto quiere decir que, si acostumbras a beber café con frecuencia, posiblemente tengas problemas de insomnio o te cueste mucho conciliar el sueño cada noche.
Por otra parte, las mujeres deberían ser más cuidadosas en el consumo de café, pues la cafeína afecta la fertilidad y aumenta los abortos involuntarios. Se recomienda que, si desea concebir un bebé, limite su consumo de cafeína a no más de 300 mg por día.
podemos señalar que la cafeína refuerza nuestra memoria y aumenta nuestra capacidad mental, lo que hace que a veces sea muy útil para pensar con más claridad y tomar decisiones. La coordinación corporal también se ve mejorada con la ingesta de cafeína. Además, aumenta la capacidad de atención y atenúa y retrasa la sensación de cansancio.
Por otra parte, estas mismas ventajas a veces se convierten en inconvenientes; no es nada recomendable acudir al café para intentar, por ejemplo, conducir más horas. Además, quienes toman cafeína habitualmente, si dejan de consumirla de golpe pueden experimentar estados de somnolencia, cansancio y apatía, e incluso dolores de cabeza. Tomada en exceso, la cafeína puede producir vómitos, taquicardia, náuseas, inquietud, temblores y ataques de ansiedad.
Hola, hay algo q no entiendo…en dos partes dice q el café «…es bueno para aliviar los dolores de cabeza…» y en otras dos partes dice q el café «…Produce dolor de cabeza.» ¿?