la mayoría de las personas tienen una vida agitada debido a las responsabilidades laborales y familiares quedando poco tiempo para dedicarse a uno mismo, sin embargo en ese valioso y poco tiempo cada vez son más las personas que lo invierten en su salud tanto física como mental.
Al ejercitar el cuerpo ya sea en un gimnasio, con un entrenador personal o sin ningún guía estamos expuestos a sufrir alguna lesión, siendo los desgarros musculares uno de los más frecuentes sobre todo en deportistas aficionados que no realizan el precalentamiento adecuado antes de iniciar el ejercicio exponiendo sus músculos a un desgarro ante una elongación brusca.
Un desgarro muscular es la rotura (parcial o total) de las fibras interiores del tejido muscular, los que han sufrido alguna uno de ellos lo describen como “una clavada de aguja”; casi siempre se presenta con una hemorragia debido a la rotura de los vasos sanguíneos que recorren los músculos de la zona afectada. Existen tres grados de desgarros según la gravedad del daño causado en la fibra muscular.
Los desgarros ocurren cuando una persona que hace cualquier actividad física realiza una elongación máxima que excede la capacidad de estiramiento muscular. También se presenta esta lesión si se hace una contracción violenta del músculo o cuando se contrae debido a una carga superior a la resistida. Generalmente se produce al inicio de un entrenamiento debido a que los músculos aún no están lo suficientemente calientes o al final de la rutina de ejercicios porque los músculos presentan fatiga o deshidratación.
El desgarro muscular suele producirse en las piernas o en la parte baja de la espalda. Los músculos que se lesionan con mayor frecuencia son los siguientes:
- Músculos de la pantorrilla – un desgarro de la pantorrilla es una rotura de los músculos posteriores de la parte baja de la pierna. La función de los músculos de la pantorrilla es ayudar a levantar el talón.
- Cuádriceps – un desgarro del cuádriceps es una rotura de los músculos delanteros del muslo. La función principal del cuádriceps es ayudar a enderezar la rodilla.
- Músculos isquiotibiales – un desgarro de los músculos isquiotibiales es una rotura de los músculos posteriores del muslo. La función principal de los músculos isquiotibiales es ayudar a flexionar la rodilla.
- Músculos paravertebrales – un desgarro lumbar o en la parte baja de la espalda es una rotura de los músculos de la parte baja de la espalda. La función principal de los músculos paravertebrales es sostener la columna vertebral y soportar el peso de la parte superior del cuerpo.
averiguar el grado de desgarro o rotura del músculo. Hay diferentes grados de lesión:
- Desgarro muscular de primer grado. Tambien se le llama “músculo extendido”. Produce una ligera molestia y no hace que se pierda demasiada fuerza en el músculo afectado. Normalmente indica que aproximadamente un 5% del músculo se ha desgarrado. Seguramente se podrá mover completamente el músculo sin sentir mucho dolor.
- Desgarro muscular de segundo grado. El dolor es un poco más que simplemente una molestia. El músculo no se ha roto del todo, pero casi. Quizá se pueda notar, al tacto o incluso con la vista, un bulto bajo la piel. Esta es la parte donde se ha producido el desgarro, y es la zona que se estaba contrayendo cuando se liberó la presión violentamente al romperse parte del músculo. Quizá se pueda contraer el músculo, pero no hasta el final del movimiento, porque produce mucho dolor.
- Desgarro muscular de tercer grado. El músculo se ha partido en dos y ya no es posible contraerlo. El dolor es muy intenso. La parte del músculo que se contrae forma un gran bulto, y seguramente se puede observar la hemorragia interna. Se necesita cirugía para reparar el músculo.
Los especialistas recomiendan las siguientes acciones para tratamiento de un desgarro muscular:
- Detener la actividad deportiva para atender inmediatamente la lesión y así evitar que se agrave.
- Reposar el músculo dolorido para impedir que la lesión aumente.
- Aplicar hielo en la zona afectada para detener la inflamación. Si no tuviera hielo en ese momento puede utilizar toallas empapadas con agua fría, cualquier producto enlatado frio o cualquier lata fria.
- Colocar un vendaje o banda elástica en el músculo lesionado.
- Mantener la zona afectada elevada.
- Empieza un programa de rehabilitación cuando ya te sientas mejor. Empieza más tarde cuanto peor haya sido la lesión. Quizá debas solicitar el consejo de un profesional antes de comenzar, pues el músculo es mucho más propenso a desgarrarse de nuevo.
¿Cómo evitar que se produzca?
- Siempre es recomendable realizar un calentamiento previo antes de iniciar la actividad física sobre todo si se hace ejercicios esporádicamente.
- A medida que el entrenamiento va llegando a su fin se debe bajar la intensidad del mismo para evitar que ocurra el desgarro por agotamiento muscular.
- Preste atención a las señales que su cuerpo le envía, si siente algún tirón en alguna zona de su cuerpo reduzca la intensidad del ejercicio o detenga el mismo.
- Consumir bebidas hidratantes en las sesiones de ejercicio.
- Ir poco a poco en la intensidad de los ejercicios que realice.
- Tener una alimentación sana, sobre todo consumiendo alimentos que contengan fibra vegetal que ayudarán a fortalecer las fibras musculares.
Recuerde que es muy importante atender la lesión durante las primeras horas (24 a 48) visitando al médico especialista en lesiones deportivas que determinará la gravedad de la lesión así reducirá el riesgo de dañar más el músculo afectado y aumentará las probabilidades de una rápida recuperación con el tratamiento adecuado para la regeneración del músculo afectado y así volver pronto a la actividad deportiva favorita que practica.
Hace días hice una mala fuerza y me esta doliendo demasiado la espalda. Mientras tomo naproxeno y metacarbamol me calma un poco pero despues el dolor regresa. Por favor digame que hago.
Mil gracias.
Aldemar Calderón
Gracias pero no es lo que buscaba