Actualmente existe una infinidad de tipos de ollas para preparar alimentos, de diferentes tamaños, usos y materiales para auxiliarnos en la cocina, sobre todo en lo que practicidad y tiempo se refiere. Las más comunes son la antiadherentes, inox, vidrio, barro, aluminio, esmaltado? ¿Pero conoces realmente la olla indicada para la preparación de los diversos tipos de alimentos?
Te dejo, a continuación, con una guía útil para entender la función de cada olla y sus efectos sobre los alimentos preparados en ellas:
Las ollas antiadherentes fueron hechas para usar a fuego bajo. Son revestidas con un plástico llamado politetrafluoretileno, material que siempre ha causado polémica debido a algunos estudios que señalan que el material puede causar daños en el organismo. La cocción debe ser realizada a fuego bajo, ya que temperaturas altas pueden hacer que el material antiadherente se descomponga y contamine sus alimentos. Es fácil de limpiar ya que nada se queda pegado.
Las ollas de inox están hechas para una cocción rápida, ideal para uso diario y para la preparación de cualquier alimento, en cualquier tipo de fogón o vitroceramica. Si posible, evita el uso de esta olla para preparar alimentos muy salados, ya que puede deteriorar. Su ventaja es que distribuye el calor de manera uniforme, garantizando una cocción rápida, sin solar residuos como la antiadherente.
Las ollas de vidrio son perfectas para salsas y sopas, también para frituras por inmersión. Son más resistentes y durables. El problema es que no conduce bien el calor y puede acabar quemando la comida sin que te des cuenta.
Las ollas de barro con indicadas para preparar pescados y frutos del mar, absorbe el aroma del alimento al largo del preparo. También es buena para cocidos de cocción lenta. La desventaja es que tienen pequeños poros que retienen suciedad y pueden ser un nido de bacterias.
Las ollas de hierro es excelente para el preparo de lentejas, arroz, alubias, sopas y carnes porque mantiene el calor constante y la temperatura alta. Ella también suelta partículas de este mineral en los alimentos durante el preparo, lo que es beneficioso a la salud, ya que el hierro es un nutriente necesario para el organismo. Solo cuidado con el exagero, la ingestión excesiva de hierro causa problemas en el sistema digestivo, así que evita que la comida quede en contacto con la olla por mucho tiempo.
Las ollas de aluminio no son indicadas para cocer alimentos ácidos como salsa de tomate, tampoco para la preparación de compotas o mermeladas. Al limpiar la olla, evita el uso de estropajos ya que ella ayuda a quitar el revestimiento de la olla y facilita que el aluminio sea transferido para la comida, lo que no es nada bueno.
Las ollas esmaltadas son perfectas para quien busca utilidad versus diseño en su cocina. Estas ollas son revestidas de capas de esmalte colorido, dando un toque divertido a la hora de cocinar.
Así como las ollas de inox, distribuyen el calor uniformemente durante el preparo de los alimentos. Son buenas para hacer carnes y nada indicadas para frituras, ya que el aceite puede calentarse demasiado formando compuestos nocivos a la salud.