Aprovechar los nutrientes y sabor de los alimentos depende básicamente de su modo de preparación. Muchas veces, la mayoría de los platos que preparamos no salen exactamente como nos gusta; la patata quema, la carne quedó dura y el arroz quedó soso. La culpa puede no ser solamente de tu talento culinario, sino que de los accesorios que utilizas. Muchas veces el método de cocción elegido tampoco puede que no sea el más adecuado.
Lo primero que deberás haces es determinar el tipo de cocción de tu alimento para después elegir la mejor cazuela para ello. Hay dos tipos de cocción, la rápida (con calor seco) ideal para alimentos con fibras blandas como carne roja y la lenta (con calor húmedo) es indicada para fibras rígidas que dificultan la entrada de calor, exigiendo más tiempo de cocción.
Freír: Método simple para freír los alimentos que atinge altas temperaturas con rapidez. Es posible conservar el sabor y el zumo natural de los alimentos. El accesorio indicado es la sartén, para frituras por inmersión, cuando el alimento es totalmente sumergido en aceite, la sartén debe ser un poco más alta.
Es utilizada para aves, carnes, pescados, frutos del mar, legumbres y tubérculos, como patata.
Saltear: similar a la fritura pero con poco cantidad de aceite. Es necesario someter el alimento (carne, legumbre, masas) a altas temperaturas para crear una capa protectora alrededor del alimento. Las sartenes son las mejores opciones para este método. Si el salteado tardará más como salsas, la sartén con laterales más grandes es mejor aliada.
Usada para carnes en tiras, frutos del mar, legumbres cocidos y masas previamente cocidas.
Brasear: cocer en fuego bajo y despacio, con poco caldo y generalmente acompañado de aromatizantes y vino. Combina humedad y calor seco, el objetivo es cocinar piezas de carnes más duras. La olla a presión es buena opción para brasear con cocción lenta.
Utilizado para pollo de granja, carne de cerdo, carne de ternera y foliosos como acelga o repollo.
Vapor: uno de los métodos más nutritivos, ya que retiene los nutrientes y el sabor natural de los alimentos, además de los zumos naturales de carnes y vegetales. Las cazuelas eléctricas son muy utilizadas, pero también las tradicionales con dos niveles. Son utilizadas para comidas light, muy buena para reducir la cantidad de grasas de los alimentos.
Guisar: método de rehogar, de cocción lenta, que consiste en hervir los alimentos y después terminar de cocinas dentro de una salsa o caldo. Las cazuelas más altas son las mejores opciones. Utilizado para carnes, aves y legumbres.
Escaldado: utilizado para alimentos delicados como frutas y vegetales. Consiste en el cambio rápido de temperatura del agua herviente creando un choque térmico para dar fin a la cocción. Cualquier cazuela es indicada y es utilizado para legumbres, masas y frutos del mar.