Las propiedades de las semillas de sésamo nos benefician en gran medida, por eso es necesario que si todavía no las has introducido a tu dieta, lo hagas a la brevedad. Tienes que saber que las semillas de sésamo son oleaginosas conteniendo ácidos grasos insaturados, proteínas que son ricas en aminoácidos esenciales y también minerales.
Al contener ácidos grasos las semillas de sésamo mantienen la sangre fluida, por lo cual ayudan a que se disuelva en mejor medida el colesterol malo. Contiene lecitina que es un gran nutriente para las células cerebrales y también para los nervios ópticos. Se puede decir que la lecitina también ayuda a reducir y controlar el colesterol.
Las semillas de sésamo nos proveen calcio el cual contiene una gran absorción para el organismo. Nos ofrece fósforo y vitaminas B3 y E las cuales son antioxidantes naturales. Su consumo está especialmente recomendado para las mujeres que están embarazadas o que están pasando por la etapa de la menopausia.
Algunas de sus propiedades
Las semillas de sésamo poseen una interesante cantidad de proteínas, además de ser ricas en metionina, un aminoácido esencial. Las grasas que contiene son “grasas buenas”, es decir, grasas insaturadas, lo que junto a su contenido en lecitina las convierte en un alimento que contribuye a reducir los niveles de colesterol en la sangre.
Además, contienen diferentes minerales como el calcio, que interviene en la formación de huesos y dientes: 100 gramos de sésamo integral contienen 1.500 miligramos de calcio.
También posee hierro, que desempeña numerosas e importantes funciones en el organismo, y zinc, mineral que participa en el metabolismo de los hidratos de carbono, las grasas y las proteínas.
Las semillas de sésamo son ricas en fibra, aún más si se consumen de manera integra, por lo que su ingesta resulta beneficiosa para la regulación de la función intestinal, corrigiendo la constipación.
La forma más común de adquirir y consumir el sésamo es en forma de semillas. Éstas pueden estar ya incluidas en productos como barras de cereal, el pan tostado o en forma de galletas, o bien pueden añadirse a gran variedad de platos. Resultan exquisitas espolvoreadas sobre frutas (excepto cítricos), ensaladas y en platos de pasta o arroz, gracias al peculiar sabor y textura que presentan. La cantidad aconsejada es de 2 cucharadas soperas diarias de semillas integrales molidas.
Propiedades de las semillas de sésamo
- Aconsejable durante el embarazo y la menopausia por su gran aporte en calcio.
- Colabora a la mejoría ante la rigidez de las articulaciones.
- Las semillas de sésamo se recomiendan en periodos de debilidad o anemia por su contenido en hierro.
- Previene la infertilidad masculina por su aporte en zinc.
- En la medicina china es utilizado para lubricar el corazón, el hígado, los riñones, el páncreas y los pulmones.
- Su aporte en lecitina (supera en cantidad a la soja) ayuda a reducir y controlar los niveles de colesterol.
- Las semillas de sésamo están muy equilibradas a nivel de sodio y potasio, con lo cual nos ayudan a tener un buen equilibrio hídrico.
- Son una buena fuente de proteínas de buena calidad.
- Ayudan a mantener una buena salud ósea.
- Restauración de los patrones normales del sueño en las mujeres que están experimentando síntomas desagradables asociados con la menopausia
Información nutricional de las semillas de sésamo (por 100 g.)
- 598 calorías.
- 20 g. de proteínas.
- 58 g. de grasas saludables (insaturadas)
- 670 mg. de calcio.
- 10 mg. de hierro.
- 5 mg. de zinc.
- Su contenido en hierro, fósforo, magnesio, cobre y cromo lo convierten en un complemento mineralizante.
- Las semillas de sésamo también nos ofrecen vitaminas del grupo B y e mg. de vitamina E.
Fitoterapéuticamente se han utilizado históricamente para calmar el dolor de muelas (preparar una infusión hirviendo 100 gramos de sésamo en un vaso de agua y dejar que el agua se reduzca a la mitad, dejar enfriar y aplicar sobre la muela inflamada), para aumentar la producción de leche, para reducir los ruidos provocados por tinnitus, para prevenir la calvicie y para combatir el estrés, entre otros más.
Ciertas variedades de semillas de sésamo superan ampliamente a la leche en Calcio, presentando hasta 1.000 mg. por cada 100 gramos, contra los 120 mg. de la leche, lo cual lo convierte en un aliado más eficaz que los lácteos en la lucha contra la osteoporosis, ya que además aporta magnesio, fósforo, cinc, cobre y otros minerales. Lo mismo ocurre con las anemias. Es más eficaz el consumo de semillas de sésamo que el de hígado de vaca, ya que el hígado de vaca solo posee 8 miligramos de hierro contra 10,5 miligramos que poseen las semillas de sésamo.