Que el ejercicio físico es fundamental para adelgazar no es ninguna novedad. Y que para hacer ejercicio no hace falta sudar y sufrir en el gimnasio, tampoco. ¿Todavía creías que para estar en forma debemos ir al gimnasio?
Hay un sinfín de actividades que haces en tu día a día que te ayudan a adelgazar. Desde ordenar la habitación de los más pequeños hasta salir a caminar son excelentes para mantener nuestra silueta, y por supuesto, cuidar de nuestra salud.
Aquí te presento varias alternativas para que puedas adelgazar sin pisar el gimnasio. Verás que no es necesario tener demasiado tiempo para ponerte en movimiento.
Si no tienes tiempo para ir al gimnasio, transforma tus actividades cotidianas en ejercicios. Por ejemplo, el movimiento de sentarnos en una silla y ponernos de pie es el mismo de las sentadillas. Cuando te sientes a comer en la mesa o a trabajar en la oficina, trata de hacer este movimiento pausadamente y con más fuerza para que rinda.
El acto de hincarte o arrodillarte también es un excelente ejercicio. Sea para ordenar los juguetes de los niños, para cocinar, colocar la ropa en el lavarropas o para limpiar los pisos, hincarse implica el trabajo de nuestros músculos centrales, como los abdominales y músculos de la espalda.
Otra actividad cotidiana que es un ejercicio en sí mismo es subir escaleras. Si vives en un departamento, no hagas trampa subiendo por el elevador: ¡usa tus piernas! Subir escaleras es perfecto para tonificar los glúteos y las piernas… ¿Leyeron, mujeres? Desde nuestra propia casa podemos entrenar.
Y si quieres adelgazar rápidamente, entonces suplanta el automóvil por… tus piernas. Mientras no sean distancias demasiado largas, perfectamente puedes ir de un lado a otro a pie. Te resultará mucho más económico y saludable que conducir.
Algunos ejercicios recomendados:
1. Fondos inclinados: Bocabajo, apoyando pies en el suelo y manos en una superficie elevada, haga flexión y extensión de brazos con el resto del cuerpo recto.
2. Remo horizontal: De pie, anclando una goma elástica frente a usted, tire de ella hacia sus caderas.
3. Sentadilla abierta: con las piernas muy abiertas y los pies hacia afuera, entréguese a la satisfacción de unas sentadillas bien hechas.
4. Zancadas atrás: De pie, con tronco y cabeza rectos, lleve una pierna hacia atrás mediante flexión de rodillas.
5. Plancha: Bocabajo, apoyando pies y antebrazos en colchoneta, forme una línea recta desde el cuello hasta los pies. Haga el mismo ejercicio pero de lado.
De cada ejercicio, realice quince o veinte repeticiones. En los ejercicios basados en mantener una postura, aguante 30 segundos o hasta que pierda la posición correcta. Descanse un minuto y pase al siguiente. Haga dos o tres vueltas a este circuito, tomándose un respiro de dos o tres minutos entre cada vuelta. Para terminar, haga algo de cardio suave, como running. Puede mezclar marcha y carrera al principio. Los primeros días, diez o quince minutos serán suficientes.