Todo tiene su técnica, y algunos chefs con experiencia, de vez en cuando comparten algunos de sus preciados secretos. Uno de ellos es que no necesariamente necesitas disponer de una barbacoa o una parrilla de carbón masiva; créeme que puedes cocinar un bistec o filete muy sabroso en una cacerola, eso sí: hay que tener un par de trucos en la manga.
Carne de buena procedencia
Ni los trucos más sabios conseguirán que cocines un plato de primera, si la carne que compres no es de excelente calidad. Mis consejos son dos: compra en un sitio de tu confianza del cual seas o te conviertas en asiduo cliente (hay menos posibilidades de que te vendan malos cortes) y pregunta hasta el cansancio sobre el origen y calidad de la carne que te están vendiendo. La tienda percibirá que eres un cliente exigente y procurará complacerte con lo mejor. Otro consejito: huele la carne al momento de comprarla, siempre debe tener un olor dulce y agradable.
Tamaño de la porción
Aconsejo para 2 personas un filete de 600 a 900gr. Retira la carne del frigorífico unos 20 minutos antes para comenzar a trabajarla a temperatura ambiente; lo primero es dejarlo previamente unas horas “marinado” con: sal y pimienta a tu gusto, unos 250 g de mantequilla, cortada en cubitos, 1 cabeza de ajo cortada pequeña todo eso en una fuente adecuada. El espesor es importante, yo sugiero por lo menos 4 cm de espesor. Busca un corte que tenga un mínimo de vetas de grasa, pero no demasiado ya que estamos buscando sabor y salud.
Cómo cocinarla
El truco es calentar el recipiente muy bien, pero sin añadir el aceite; lo primero es colocar la carne hacia abajo en la cacerola y dejar que se selle en un lado, después de 2 3 minutos darle la vuelta y poner la mitad de la mantequilla y el “jugo” donde la habíamos dejado reposar.
Luego volver a dar vuelta, bajar el fuego y añadir el resto de la mezcla anterior (dependerá de la frescura de la carne, la cantidad de “zumo” que haya generado en el proceso anterior). Cocinar y dar vuelta cada par de minutos hasta que la carne tome buen color. Con el tiempo ganarás experiencia; al principio si dudas, corta la carne en su parte más gruesa o media para ir verificando si está cocida a gusto de los comensales. Al final, dejar reposar por unos 5 a 8 minutos cerca de una fuente de calor para que no se enfríe y recomiendo servir con patatas fritas y crema de espinacas.