A ver, lectores de VivirSalud, de las cinco porciones de frutas y vegetales que se nos recomiendan diariamente, ¿cuántas consumen? Lamentablemente son pocas las personas que se acostumbran a integrar estos alimentos nutritivos y saludables en sus comidas diarias.
A pesar de saber lo importantes que son para nuestra salud, a veces no sabemos qué estrategias adoptar para incluirlas en nuestros hábitos de alimentación. Pero no te preocupes, porque hoy veremos varios trucos para consumir más frutas y verduras. Son consejos de la nutricionista Heather Mangieri de la American Dietetic Association.
¡Toma nota para darles la bienvenida a las frutas y vegetales a tu dieta!
Desde temprano
Una sencilla forma de aumentar nuestra ingesta de frutas y verduras diariamente es consumiéndolas desde temprano, en nuestros desayunos. Por ejemplo, acompaña tu yogurt con fresas y arándanos, tu plato de cereal con plátanos o el omelette con tomates. Integrar estos alimentos saludables a tu primera comida del día es una excelente idea para comenzar la jornada con los nutrientes necesarios.
Variar el tipo de verduras que consumimos es otra medida a tener en cuenta, pues en la variedad está el gusto, y en el caso de la alimentación, comer siempre lo mismo acabará por aburrirnos y hacer que tengamos cierta repulsa hacia ese tipo de comida. Lo mismo sucede a la hora de elegir las verduras, y es que debemos alternar verduras congeladas con frescas para así evitar tener repulsa a este alimento. Desde luego que el sabor de las verduras frescas no tiene nada que ver con el de las congeladas o en conserva, ya qué estas últimas tienen menos sabor que cualquier verdura fresca que encontremos en el mercado.
Evitar presentar las verduras solas en un mismo plato es una buena solución para ingerir más cantidad. Si mezclamos las verduras con otros alimentos en el mismo plato y las servimos como acompañamiento las consumiremos de mejor gana y sin apenas darnos cuenta, ya que para las personas que no les gusta demasiado su sabor y textura se disimularán con la carne por ejemplo o con el pescado que ingeriremos.
Preparar las verduras de diferente manera a la habitual puede ser otra buena solución, ya que al no ver la pieza entera muchas personas serán más permisivas a la hora de consumirlas. Una cosa que podemos hacer es prepararlas en forma de puré, ya que nos permitirá incluir gran número de verduras que nos aportarán nutrientes beneficiosos para el organismo. Otra manera de enmascararlas de manera apetitosa es mediante la preparación de pasteles de verduras, que será el postre más adecuado y sano que nos podamos llevar a la boca.
1. Agrega un plátano o alguna otra fruta como fresa o zarzamora a tu cereal y/o yogur de tu preferencia
2. Incluye una ensalada pequeña diaria antes de tu plato fuerte en la comida
3. Si deseas consumir las verduras cocidas, las puedes cocinar al vapor y combinarlas con carne, pollo o mariscos
4. Prepara salsas de frutas frescas que le puedes agregar a tu postre favorito o si te gusta los alimentos agridulces, puedes mezclar el sabor dulce con salado
5. Un snack saludable es consumir una manzana fresca, una naranja o jícama, pepino y zanahoria con mucho limón y poca sal, para evitar la retención de líquido.
6. Prueba todas las frutas. Consume frutas y verduras con las que no estés familiarizado, para darle variedad no sólo a tu paladar, sino a tu cuerpo, con la finalidad de que tu metabolismo se acelere y pierdas lagrasa de más
7. Si eres amante de los sándwiches, le puedes agregar verdura como lechuga, espinaca, jitomate y un aderezo bajo en calorías