La actividad física ayuda a permanecer sano, enérgicos e independientes cuando se envejece. Los adultos mayores de 65 años de edad gastan en promedio 10 horas o más cada día sentados o acostados. Esto los hace el grupo de edad más sedentario y pagan un alto precio por su inactividad, con tasas muy altas de cataratas, obesidad, enfermedades al corazón y una muerte temprana en comparación con la población en general.
Cuando te haces mayor, es aún más importante que te mantengas activo si deseas mantenerte saludable y mantener tu independencia. Si no te mantienes activo, todas las cosas de las cuales has siempre disfrutado de realizar comienzan a ser un poco más difícil de iniciar.
Cosas tan cotidianas como el perseguir los placeres simples, tales como jugar con los nietos, caminando a las tiendas y mantener el contacto con amigos son perfectas actividades para mantener la autonomía a una avanzada edad.
A una edad avanzada se empieza a tener dolores y molestias que nunca antes se habían tenido y menos energía para salir. Las personas de la tercera edad también puede ser más vulnerable a caer, todo esto puede llevar a ser menos capaces de cuidar de sí mismo y de hacer las cosas que disfrutan.
Evidencias Solidas
Hay sólidas evidencias científicas que señalan que las personas que están activas tienen un menor riesgo de enfermedades cardíacas, apoplejía, diabetes tipo 2, algunos cánceres, depresión y demencia.
Si se desea que las personas de la tercera edad se mantengan libre de dolor, se les reduzca el riesgo de alguna enfermedad mental y permanezcan independientes en la vejez, deben seguir adelante con sus vidas. Es así de simple.
Hay muchas maneras para que la tercera edad se mantenga activa, y muy pocos las ejercen.
Tipos de deportes para la tercera edad
La actividad física o deportes para la tercera edad, se refiere a todo lo que tenga al cuerpo en movimiento. Se puede incluir cualquier cosa, desde la caminata hasta deportes recreativos.
En un nivel básico, significa el asegurarse de que no se gasten horas en extremo en estar sentado durante el día. Esto significa evitar largos períodos de visualización de TV, el uso de la computadora, conducción, sentarse a leer, hablar o escuchar música.
Dentro de las actividades básicas, se debe procurar estar al menos 150 minutos (2 horas y 30 minutos) a la semana realizando una actividad aerobia moderada.
La idea que los ejercicios para tercera edad se realicen a lo largo de todos los días, preferiblemente en plazo de 10 minutos de actividad o más. Cuanto más se realice, más beneficios de salud se pueden obtener.
Una manera de lograr el objetivo semanal, es realizar una caminata de 30 minutos por lo menos cinco días a la semana. Al menos dos días a la semana, las actividades deben centrarse en fortalecer los músculos y huesos, esto se puede realizar con un entrenamiento simple con pesas, como el llevar cargas o realizar jardinería.
Ejemplos de actividades aeróbicas de intensidad moderada: caminar rápido, realizar gimnasia acuática, andar en bicicleta, jugar al tenis de dobles, cortar el pasto con una cortadora que se debe empujar.
Las tareas cotidianas como ir de compras, cocinar o las tareas domésticas no se cuentan como actividades de intensidad moderada, debido a que este esfuerzo no es suficiente para elevar el ritmo cardíaco.
Ahora si se quiere ir a un ritmo más «frenético» se puede realizar actividad física más intensa por 75 minutos a la semana, los cuales llegarían a remplazar los 150 minutos de intensidad moderada, por ejemplo en vez de jugar tenis en pareja, se puede jugar singles.
La investigación sobre este tema muestra que es nunca es demasiado tarde para adoptar y cosechar los beneficios en la salud de un estilo de vida más activa. Por ejemplo, los adultos mayores que son activos reducirán su riesgo de enfermedad cardíaca y de accidentes cerebrovasculares a un nivel similar como personas más jóvenes que están se consideran activas.
Pero este es un tema que no se puede tomar a la ligera, si una persona adulta mayor ha estado por un tiempo inactiva, lo mejor es no apurar los plazos con este tipo de ejercicios, y lo importante es ir acumulando actividad de manera gradual para así poder llegar a los niveles recomendados dentro de la tercera edad.