Como todos sabemos, el ritmo de vida de la sociedad occidental es cada vez más frenético y afecta negativamente a nuestra salud. Cada vez más personas padecen estrés a diario lo que se traduce en una respuesta fisiológica con síntomas como tensión, ansiedad, irritabilidad, miedo.
Además, recientemente hemos conocido un estudio que demuestra que una buena gestión del estrés a través de cambios en el ritmo de vida puede aumentar nuestra longevidad. El estudio del Instituto de Investigación de Medicina Preventiva indica que nuestros telómeros (parte del cromosoma que incide en el envejecimiento) pueden prolongarse mejorando así nuestra vida.
Pero, ¿qué cambios puedo introducir en mi ritmo de vida? Principalmente ocupando mi tiempo libre (fuera del trabajo) en ocio y ejercicio. Uno de los más recomendados por médicos es el Tantra Yoga en el cuál se realizan ejercicios de respiración y actividades que otorgan una energía positiva para afrontar nuestro día a día. De alguna manera nos da fuerza a través de un perfecto equilibrio cuerpo mente.
Además realizar ejercicios algo más físicos contribuye a reducir el estrés y mejorar nuestra salud. Y es que al realizarlos liberamos endorfinas (la hormona de la felicidad) que tiene un efecto analgésico en nuestro organismo.
Por otro lado, una dieta adecuada puede contribuir a mejorar nuestra salud en situaciones de gran presión. Podéis encontrar información nutricional a respecto en el enlace.
Al final todo consiste en cambiar nuestro ritmo de vida occidental y hacerlo un poco más oriental.
Qué hacer para reducir tu nivel de estrés
- Mantén una buena organización y un buen enfoque, para después no tener prisas (prioriza lo importante y no pierdas visón global).
- Sé realista con el tiempo que te llevará cada tarea, para no calcular de menos (tampoco te desesperes si te lleva más de lo previsto. Calcular tiempos es difícil porque siempre surgen imprevistos. Con la práctica calcularás mejor)
- Deja de procrastinar, esto es, postergar. Posponiendo las cosas sólo conseguirás que se acumulen. Y ya sabemos que cuando se aproximan fecha límite o acontecimientos importantes aumenta el estrés.
- Relativiza la importancia de las cosas. Es muy probable que sean pocas las que merecen provocarte estrés.
- Pon ‘al mal tiempo buena cara’. Ser positiva/o te ayuda a llevar todo mejor.
- Aprende a aceptar las cosas como vienen, y haz lo posible para que no te perjudiquen.
- Ten una buena higiene del sueño, el descanso de calidad es imprescindible.
- Aliméntate adecuadamente, balanceando hidratos, proteínas y grasas.
- Utiliza la herboristería. Tila, valeriana, pasiflora, espino blanco, te ayudarán.
- Haz todos los días 30 minutos de ejercicio. Una simple caminata es suficiente.
- Practica ejercicios de relajación y meditación guiada (tienes videos en YouTube).
- Guarda un ratito para ti todos los días, y empléalo en algo que te haga disfrutar.
- Entiende que la calma viene de tu interior. No esperes a que pase algo ‘fuera’.
Manteniendo el enfoque y mejorando tu organización, no sólo aumentarás tu rendimiento y serás un/a buen/a líder, sino que además evitarás el estrés. También tendrás que aprender ejercicios de relajación y meditación guiada, alimentarte bien, descansar lo suficiente, y sobre todo, tendrás de dejar de luchar, para lo que necesitas aprender a aceptar lo que te toca vivir. No se trata de lo que vives, sino de cómo lo vives.