Un dulce a nadie le amarga, o eso dicen. Yo lo confirmo, creo que a veces un dulce siempre viene bien y mas si nos gusta lo que vamos a comer. Por ello hoy os traigo mi manera de comer de comer un plátano frito, mucha gente lo hace diferente, rebozado o con algún coñac. Yo no y ahora veréis como lo preparo.
Empezamos con la compra y otros detalles.
Grado de Dificultad: Fácil
Tiempo de Preparación:10-15 minutos
Ingredientes:
- 1 plátano
- margarina o mantequilla
- caramelo, leche condensada o miel
Ya podemos empezar con la elaboración de este rico y rápido capricho dulzón. Empezamos pelando el plátano. Se que se utiliza otro tipo de plátano, pero este es el que encontré para hacerlo.
Ahora en una sarten ponemos un poco de margarina, para que se funda, lo hago con esta y no con mantequilla porque me gusta mas.
Una vez tengamos la margarina fundida, ponemos el plátano para que se fría. Debemos estar atentos para que no se nos queme no el plátano ni la margarina. Cuando le demos la vuelta, con delicadeza, porque se nos puede romper fácilmente. La idea es lograr que quede blando en el interior, para saber si esta lo pincharemos.
Una vez lo tengamos blando lo sacamos y ponemos un plato. Ya solo queda decorarlo con lo que mas nos guste. La variedad es amplia y aunque solo os haya puesto tres ingredientes en la receta, también esta muy bueno con mermelada o nocilla. Experimentar, conoceréis nuevas uniones riquísimas.
Como veis es un postre sencillo que mezcla fruta con dulce, es un capricho perfecto para cuando necesitamos una dosis extra de dulce.
Solo me queda desearos buen provecho.