Consejos para un peso saludable en el embarazo. Muchas veces las embarazadas se preocupan de antemano por el aumento de peso, eso conlleva a que coman muy poco, poniendo en riesgo al futuro bebé.
Si bien el aumento de peso no puede ser excesivo, tampoco hay un número rígido para tenerlo como meta. La buena nutrición es importante para un embarazo saludable Sin embargo, es igualmente importante que el aumento de peso suficiente. El bebé debe recibir una nutrición adecuada, no es sabio hacer dieta en el embarazo.
El peso recomendado para amentar es 1 kilo mensual, pero es algo difícil de controlar, por eso un aumento de peso saludable significa, que debemos alimentarnos bien, aumentarconsumode frutas, verduras, cereales, y dejar de lado los dulces, y demasiadasharinas(anquen no suprimir).
La mama debe ser consciente, que luego delembarazose puede retomar una dieta, pero no es aconsejableadelgazaren el embarazo, porque los nutrientes necesarios para elbebeen crecimiento pueden afectar para siempre su salud.
Recuerde, su cuerpo necesita la energía que los alimentos le proveen, nada dedietaslocas y restricciones, no se desanime si durante los primeros tres meses aumenta mucho de peso, luego el peso se estabilizara y su peso aumentara a ritmo del crecimiento del bebé.
La mujer embarazada debe cumplir estas comidas: desayuno, almuerzo, merienda y cena. Manteniendo los principales grupos de alimentos que son: grupos de proteínas (carnes), vegetales, frutas, granos y lácteos. Con esos consejos usted tendrá unembarazosaludable para usted y su bebé.
Es normal que las mujeres aumenten de peso cuando están embarazadas. Sin embargo, ¿cuánto aumento de peso podemos esperar? Para la mayoría de las mujeres sanas y que tenían un peso adecuado previo al embarazo, el aumento de peso recomendado durante el embarazo ronda entre los 9 y 12 kg. Este aumento será controlado por el obstetra, ya que si es deficiente puede asociarse al bajo peso del bebé al nacer, y si es excesivo, puede relacionarse con enfermedades maternas tales como diabetes o hipertensión, que complican el embarazo. Un peso adecuado permitirá tener un embarazo saludable y agradable, experimentar un parto normal y alcanzar reservas de nutrientes suficientes para amamantar luego al bebé y mantenerse saludable.
La dieta ha de ser variada y equilibrada. Lo importante es tomar alimentos ricos en nutrientes y vitaminas como ácido fólico, hierro, calcio y yodo, pero no en grasas. La dieta ha de ser variada a base de verduras, frutas, cereales, lácteos y legumbres, sin olvidar el aporte diario de proteínas de carne y pescado.
Una dieta sana icluye mantener una hidratación correcta. Beber la suficiente agua y leche que nos aporte calcio es fundamental. También podemos tomar zumos, mejor naturales y no azucarados. Por supuesto, olvidémonos de las bebidas alcohólicas y del café
Para complementar una dieta sana el médico nos recomendará determinados complementos vitamínicos que incluyan ácido fólico, junto a otros suplementos vitamínicos y de minerales también beneficiosos para el embarazo, como hierro, yodo, calcio… De este modo ayudamos al feto a desarrollarse adecuadamente evitando carencias que podrían causar complicaciones tanto para el bebé (bajo peso, espina bífida…) como a la madre (anemia, preeclampsia…).