Dormir bien es vital para la salud y para poder estar bien, de lo contrario, se producen cambios bruscos de humor, cansancio, agotamiento crónico, tristeza, estrés, falta de rendimiento en el trabajo En Buenasalud te damos las claves para dormir 8 horas diarias:
1. Lleva unos horarios regulares siempre. El fin de semana puedes tomarte este tema de una forma más flexible, sin embargo, el domingo evita estar en la cama hasta tarde porque en ese caso, por la noche te va a resultar más difícil descansar.
2. Opta por un colchón firme y de calidad. Por ello, conviene renovar el colchón cuando por el uso se ha estropeado. Ten una vida activa, sal todos los días a caminar.
3. Evita el consumo de café. Disfruta mejor de una infusión antes de dormir.
4. Analiza las causas de la falta de descanso adecuado. Por ejemplo, si duermes con una persona que ronca puede que haya llegado el momento de dormir en habitaciones separadas o también, puedes utilizar tapones para los oídos.
5. Evita estar en el ordenador por la noche porque eso, estimula la mente en exceso.
6. Un baño relajante antes de dormir puede ayudarte a descansar.
7. Baja la persiana de la habitación hasta abajo para que no entre nada de luz. Aleja el despertador de la cama para no escuchar el tic-tac.
No comer una comida pesada por la noche, optar por una merienda liviana.
Es importante para regular el sistema hormonal que la habitación esté a oscuras, sin luces abiertas, ni ventanas por donde entre la luz de las farolas. La glándula pineal es sensible a la luz. Cuando disminuye la luminosidad, segrega más melatonina (también conocida como la hormona del sueño), que induce al estado de relajamiento y somnolencia.
Levantarse siempre a una hora fija, ayuda a corregir el biorritmo, aunque haya dormido pocas horas, así conseguirá establecer un ciclo sueño-vigilia.
Evitar los ejercicios intenso antes de dormir. Las endorfinas liberadas con el ejercicio provocan que tu cuerpo esté activo y sea más difícil alcanzar el sueño con rapidez. Sin embargo, puedes hacer ejercicios de meditación, relajación y aceptación, además de entrenar regularmente, ya que favorece un sueño de calidad, (aunque evita hacerlo entre 4 h y 6 h antes de irte a dormir).
Evitar las siestas largas (más de 30 minutos) al final de la tarde o principios de la noche.
Es muy imprescindible que el colchón tenga la suavidad necesaria, es decir no sea ni demasiado blando ni demasiado duro. La almohada ha de tener la densidad y la altura adecuadas para ti, a ser posible ergonómica. te presente que la cama debe ser utilizada para dormir y no para leer, ver la televisión o trabajar.