Comer bien para dormir mejor. No sé si te has detenido a pensar el tema desde esta perspectiva, pero créeme que la relación entre la calidad del sueño y la calidad de la alimentación, existe y ha sido objeto de estudio desde hace mucho tiempo. Si padeces algo de insomnio, o tan sólo no consigues dormir tan bien como quisieras, te recomiendo leer este post con suma atención…
En la mayoría de las casas la última actividad mas realizada antes de dormir es la cena. Es común comer antes de dormir, ya que dormirse sin hambre y pronto para un buen descanso nos parece es lo ideal, pero hay que tener cuidado.
Si deseamos un buen sueño hay que tener en cuenta que hay alimentos que complican este proceso ya que como su digestión demora más tiempo el sueño se nos puede hacer más difícil, y más aún con el cuerpo en reposo.
Los alimentos que más demoran en digerirse son las grasas, proteínas y los altamente calóricos. Si bien no pueden faltar en una cena, no deberán estar en exceso.
Los picantes aceleran, mientras que el alcohol si bien la mayoría de las personas piensan que favorece al sueño, también acelera por momentos, pero la deshidratación que genera puede ser mala para nuestro sueño.
Los alimentos que poseen Triptofano son los que ayudan a regular las fases del sueño, un ejemplo claro son los lácteos.
Lo recomendado es comer lo más temprano posible, y esperar un poco para bajar la comida, ya que no es sano acostarse con la sensación de estar lleno, además que de esa forma ayudamos a la digestión.
Alimentar el sueño
Mientras dormimos se produce una mayor secreción de algunas hormonas como la de crecimiento, prolactina, testosterona o melatonina, y neurotransmisores, en especial la serotonina. Todas estas sustancias están implicadas en la regulación de las fases de sueño y de vigilia. Hay alimentos que por su particular composición nutritiva y según la cantidad ingerida afectan al sistema nervioso y tienen una acción directa sobre el sueño. Los nutrientes que aumentan la síntesis de neurotransmisores y hormonas estimulantes del sistema nervioso central -dopamina, adrenalina y noradrenalina- dificultan el sueño; por el contrario, los que favorecen la liberación de reguladores relacionados con la sensación de relajación -melatonina, serotonina-, inducen al sueño.
- Triptófano para dormir. El triptófano es un aminoácido esencial (componente básico de las proteínas) necesario para la formación de melatonina y serotonina. Ambos neurotransmisores participan del ciclo del sueño. En la dieta, el triptófano se encuentra en alimentos tan variados como la leche, los plátanos, la carne o el pescado.
- Suficientes hidratos de carbono. Los carbohidratos -pan, arroz, pasta y patatas- estimulan la secreción de insulina, hormona que aumenta la disposición del triptófano para formar serotonina.
- Más vitaminas. La B1 y B6, en particular, tienen un papel relevante en el buen funcionamiento del sistema nervioso en su conjunto. La B6 además se precisa para la biosíntesis de serotonina. Comer muchos azúcares y dulces reduce la acción de la vitamina B1 en el sistema nervioso porque esta vitamina se precisa para metabolizar los azúcares. Por ello, en caso de dificultad para dormir conviene evitar estos alimentos.
- Más calcio y magnesio. Permite las conexiones nerviosas. Si su aporte dietético es suficiente, se duerme mejor y se descansa más.
hábitos alimenticios que le ayudarán a dormir mejor:
1.- Asegúrate de que su dieta sea variada y equilibrada. Comer sano le ayudará a dormir.
2.- El exceso de sal puede dificultar el estado de relajación necesario para dormir. Por lo tanto, intenta no salar en demasía sus platos.
3.- El azúcar actúa como estimulante y puede interferir en su sueño. Vigila su ingesta.
4.- No es recomendable irse a la cama con hambre ni tampoco con el estómago demasiado lleno ya que la digestión podría interferir en el descanso.
5.- La última ingesta del día debe hacerla aproximadamente una hora antes de irse a dormir.
6.- Intenta hacer sus comidas en horarios regulares ya que esta rutina ayuda al cuerpo a sentir somnolencia por la noche.
7.- Si se despierta por la noche, no le ofrezcas automáticamente alimento pues su cuerpo puede acostumbrarse a esa rutina interrumpiendo sistemáticamente su sueño. No debe identificar «comida» con «sueño«.