Uno de los grandes enemigos de toda dieta es la ansiedad, esas ganas de comer alimentos calóricos que son casi imposibles de superar. Por lo general terminamos cediendo y después sintiéndonos culpables, por eso, hoy te damos unos fantásticos consejos para evitarla. Debes saber que hay algunos alimentos en especial que son muy útiles para reducir la ansiedad, a continuación vamos a darte una lista de alimentos que nos ayudan a sentirnos mejor. ¡Esperamos te sea de gran ayuda!
– Melocotones, esta deliciosa fruta contiene fitonutrientes, los cuales son conocidos por ser muy útiles para la piel y combatir el cáncer. Sin embargo, como muestran estudios, también es un sedante natural que puede ayudar a reducir el estrés y la ansiedad.
– Bayas de Acacia, quizás no estés familiarizado con ellas ya que son un alimento relativamente nuevo para muchos. Las mismas también contienen fitonutrientes que son capaces de levantar el ánimo, lo que le permitirá sentirse mejor y nivelan los niveles de azúcar en la sangre.
– Arándanos, una fruta que puede decirse es mágica por la cantidad de beneficios que aporta. Los mismos nos ayudan a mejorar el estado de ánimo e inclusive se ha probado que ayudan a combatir la enfermedad de Alzheimer.
– Almendras, frutos secos ricos en zinc y vitamina B12, estos dos nutrientes son potenciadores del estado de ánimo. Además, contienen grasas monoinsaturadas, un ingrediente esencial para la lucha contra las enfermedades del corazón.
– La raíz de Maca, se trata de un polvo que se hace a partir de una raíz peruana, está también contiene un fitonutriente que pueden ayudar a evitar la ansiedad y la depresión, a condición de que usted pueda encontrar la forma sin procesar.
Cuando se sufre de un ataque de ansiedad, muchas personas buscan alimentos altos en azúcar, lo que representa un riesgo, ya que al tener más calorías y energía en el cuerpo éste se estresa más y desea sacarla a como dé lugar.
Si se padecen de ataques constantes de ansiedad hay que evitar a toda costa el consumo de cafeína, pues ésta actúa sobre el sistema nervioso central acelerándolo lo que puede aumentar las sensaciones negativas durante un ataque de pánico.
Un efecto contrario producen alimentos como los cereales, hortalizas, frutos secos y carbohidratos complejos, ya que éstos actúan como tranquilizantes al incrementar la serotonina, la sustancia que produce lasensación de bienestar en el cerebro, un neurotransmisor con propiedades relajantes.
El magnesio tiene propiedades relajantes, además de que evita que el nivel del ritmo cardíaco se eleve. Este mineral puede encontrarlo en los frutos secos, las legumbres, algunos cereales como el trigo y en verduras como las acelgas o espinacas.
Fruta seca. La fruta seca o deshidratada es una buena opción para reducir la ansiedad. Tiene pocas calorías, es nutritiva y además provoca saciedad.
Yogurt. Este lácteo es otra opción en casos de ansiedad. Puedes mezclarlos con frutas o con cereales y obtendrás de inmediato una sensación de relajo y bienestar, con la ventaja de además estar comiendo algo liviano y sano.
Barritas de cereal. Son una muy buena idea cuando estás con esos ataques ansiosos que te llevan a engullir y engullir sin poder parar. Las barras de cereal aportan pocas calorías, producen saciedad y además son ricas, por lo que eliminan esas ganas de comer algo dulce.
Frutas. La fruta nos ayuda a nivelar los niveles de azúcar en la sangre, lo cual contribuye a reducir los períodos ansiosos. Cualquier fruta está permitida, pues es un alimento liviano y muy nutritivo.
Gelatinas. Aportan poquísimas calorías y además nuestro cerebro lo interpreta como si estuviéramos comiendo una golosina, por lo que secreta endorfinas y produce sensación de bienestar.
Estos son algunos de los alimentos que haremos bien en incluir en nuestra dieta para combatir la ansiedad, ¡esperamos esta información te sea sumamente útil!
Todos estos consejos son solo orientativos y los pacientes con problemas de nutricion deben consultar a un nutricionista o dietista titulado para recibir las indicaciones dietéticas más adecuadas en cada caso. No inicie ninguna dieta no convencional sin consultar previamente con un profesional de la salud.
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