Los alimentos contra la inflamación son importantes para las personas con diversos problemas de salud relacionados con la inflamación. Por cierto, la diversidad puede ser tan grande que puede ir desde enfermedades neurológicas complejas como la Esclerosis Múltiple, hasta problemas gástricos pasajeros pasando por todo tipo de niveles intermedios de distintas dolencias. Lo cierto es que es posible adoptar una dieta contra la inflamación, lo que no es realmente una dieta para bajar de peso, aunque muchas personas terminan perdiendo peso como consecuencia de hacerla. Lo que sí es seguro, es que una dieta donde abunden este tipo de alimentos, sin duda es una dieta para ayudar a sentirte mejor, lo que te permitirá disfrutar de la vida mientras experimentas menos molestias y dolores que tienen su origen en procesos inflamatorios.
Seguramente la pregunta que te haces tiene que ver con saber cuáles son esos alimentos que promueven una vida más saludable. Revelándote sólo uno de ellos (el salmón, por su interesante contenido de Omega3), te invito a estar atento, pues dedicaré varios post en estos días a conocer estos alimentos y cómo incluirlos en tu dieta.
La fruta tiene un fuerte efecto de limpieza de las células y tejidos con lo que si consumimos mucha fruta hará falta que nuestros órganos de eliminación como son el intestino o el hígado estén funcionando eficientemente para que podamos eliminar estas toxinas. Si esto no es así se puede agravar o producir una inflamación ya que necesitaremos esa otra ruta para eliminar las toxinas que limpia la fruta. Por ejemplo, el caso extremo sería un ayuno de frutas que produciría tal eliminación de toxinas de los tejidos que agravaría una inflamación ya existente. Las toxinas que limpia la fruta se relocarizarían en el sitio de la inflamación ya que en ese momento esa es la vía que está utilizando el organismo para eliminarlas.
En cambio, los vegetales de hoja verde siempre que estén bien cocinados, ayudan a limpiar la célula pero a la vez también ayudan a la eliminación de toxinas por las rutas normales ya que proporcionan fibra al intestino. Los componentes nutricionales de los vegetales de hojas verde los hacen mas indicados para reducir la inflamación que otros vegetales como pueden ser tubérculos o vegetales de tallo. Su alto contenido en calcio hace que tengan un efecto calmante de la inflamación. Se deben consumir bien cocinados ya que crudos tendrían un efecto mas parecido a la fruta, es decir con un mayor poder de limpieza
Algunos consejos:
- Eliminar todo tipo de alimentos ricos en ácido araquidónico sobre todo la carne pero también los lácteos y los huevos.
- Reducir la ingesta de alimentos ricos en ácidos grasos omega 6, como los frutos secos, la soja, las semillas de girasol y sésamo.
- Aumentar la ingesta de alimentos ricos en ácidos grasos omega 3, como las algas sobre todo marrones y rojas, los pescados azules como el salmón, el atún, la caballa, las sardinas o los boquerones, las semillas de lino y el aceite de lino y de cártamo. Se recomienda consumir una cucharada diaria de aceite de lino o de cártamo, tomados en frío.
- Disminuir la fruta y los alimentos crudos, sobre todo las frutas ácidas. Se pueden consumir frutas como pera, manzana o plátano que tienen un menor poder de limpieza.
- Aumentar la cantidad de verduras de hoja verde como espinacas, acelgas, coles de Bruselas, repollo, berros, canónigos, endibias, lechuga, perejil, culantro, etc. Estas verduras deberán consumirse principalmente cocinadas o hervidas al vapor. Se recomiendan en una dieta anti-inflamatoria por su efecto calmante y desintoxicante.
- Aumentar la ingesta de alimentos ricos en vitamina C y E pero que se ajusten a las anteriores recomendaciones. Por ejemplo, la vitamina C la encontraríamos en el pimiento rojo, pimiento verde, guisantes, coles de Bruselas, brécol, repollo o boniato. Alimentos ricos en vitamina E serían el pan integral, los cereales integrales, el aceite de germen de trigo y el aceite de oliva.