No sólo las mujeres debemos preocuparnos por el cuidado de las piernas. También a los hombres les vendría bien un tratamiento de spa para esa parte del cuerpo. Tengamos en cuenta que las piernas son el apoyo de nuestro organismo, y por ello podemos sentirlas cansadas, doloridas y hasta hinchadas cuando pasamos mucho tiempo de pie o sentados.
¿Y qué mejor que darle un descanso a nuestras piernas que con un spa en casa? Sí, para relajarte no necesitas pagar un spa: ¡puedes hacerlo en tu propio hogar! Sigue estas indicaciones para lograrlo:
Aromaterapia: Una de las partes clave de nuestro SPA son las velas. La iluminación es clave para no sobreexcitar a nuestro cerebro y enviarle las señales que indican que es momento de abandonarse a la nada y dejar de hacer lisas mentales de cosas pendientes. Apaga las luces y déjate iluminar sólo por la luz de las velas y arropar por los aromas que hemos seleccionado para que te relajes al 100%.
Toma un baño caliente. Llena la tina con agua a la temperatura correcta, ya sea que te guste muy caliente o simplemente un poco tibia. Mientras se llena la tina, baja las luces y enciende unas cuantas velas. Además, puedes relajarte aún más, haciendo algunas de tus cosas favoritas.
Exfolia la piel Use una esponja vegetal o un exfoliante para el cuerpo con el fin de exfoliar completamente los brazos, las piernas y el torso. La piel estará más suave, tersa y saludable cuando salga de la bañera.
Masajear los músculos adoloridos : El masaje es generalmente un lujo costoso, de manera que tómate un tiempo para aprender a darte masajes. Los libros de biblioteca o la Internet son buenas fuentes de información sobre cómo hacer masajes. Aprende a dar masajes en tu cara y cuello, cabeza, manos y pies, y los músculos internos en los brazos y las piernas para calmarte y relajarte. Si no te gustan los aceites, usa talco para que no se estire. Masajea lentamente y combina tus movimientos con la respiración.
Máscara facial: Una de las mascarillas más sorprendentes es una que utiliza el ácido salicílico, el cual elimina las células muertas de la piel para refrescarla y promover el crecimiento de nuevas células por debajo. Reúne cinco tabletas de aspirina, un tazón pequeño y aceite de almendra dulce o agua caliente. Tritura las tabletas convirtiéndolas en un polvo fino y luego agrega una cantidad suficiente de aceite o agua para hacer una pasta fina, la cual extenderás sobre tu rostro y cuello durante 10 minutos. Enjuaga la máscara de la cara con agua fría y seca. Observa cuán fresca y limpia se siente tu piel.
Agrégale sales de baño, aceites esenciales y otros ingredientes al agua. Esta es una forma excelente de mejorar el baño y también te dará los beneficios de la aromaterapia. No tienes que limitarte a las sales de baño. Puedes agregar burbujas, aceites, perlas, bombas de baño y cualquier otra cosa que te ayude a relajarte.
Consiente tus manos: No olvides tus manos una vez que hayas consentido el resto de tu cuerpo. Dáles un tratamiento por inmersión en un recipiente de agua tibia en la que hayas puesto cinco gotas de aceite esencial de lavanda y, si tienes un poco, una pizca de flores secas de lavanda. Remoja tus manos durante 10 minutos, luego enjuágalas y sécalas. Masajea tus manos con una crema hidratante ligera o un par de gotas de aceite de almendras dulces.
De la ducha pasamos al sillón: Luego del placer logrado en el agua, nos acomodamos en un asiento lo más confortable posible y realizamos masajes en la zona con aceite corporal. Presionamos la pierna ascendentemente desde el tobillo hacia el muslo, realizamos unas 15 repeticiones. Luego agitamos las puntas de los pies.
Ejercicios sobre la cama: Nos apoyamos boca arriba, levantamos las piernas formando un ángulo de 90 grados con las mismas y realizamos movimientos de pedaleo, hacemos esto durante unos 10 minutos.
Con las piernas estiradas levantadas, formando un ángulo de 45 grados, las separamos y las juntamos en el centro. Si no les es posible a 45 grados a 90 esta bien. Hacemos esto 3 series de 15 repeticiones, descansamos entre cada repetición 30 segundos.