Problemas de consumir poca agua

Jesus L. Rodriguez

La hidratación es un aspecto fundamental de nuestra salud, siempre estamos recordando la importancia de consumir al menos dos litros diarios. Hoy vamos a explicarte por qué esto es importante, de forma que te asegures de beber agua todos los días, ya que el no hacerlo puede traernos problemas muy graves, presta mucha atención!

Según estudios el no consumir las cantidades de líquido necesarias incrementa la posibilidad de sufrir de ciertas patologías. Especialmente en el caso de individuos que realizan actividad física frecuentemente o que están bajo una dieta. Quienes no se hidratan correctamente corren riesgo de padecer problemas renales, intestinales y circulatorios. Además, se ralentiza la digestión, se pueden desarrollar dificultades en el sistema circulatorio y en los riñones.

Por otro lado, al estar deshidratados comenzamos a tener migrañas, ya que el cerebro y los ojos no reciben la cantidad necesaria de agua. Este tipo particular de deshidratación eventualmente ocasiona una inflamación en la parte posterior del ojo y posiblemente una disminución o pérdida de la visión. Entre los principales síntomas de deshidratación se destacan: dolor de cabeza, calambres, fatiga, cambios de humor y dolores musculares.

El consumo diario recomendado de la más común de las bebidas se sitúa en 2,5 litros para los hombres y 1,5 para las mujeres. La cifra incluye la cantidad ingerida en los alimentos, lo que reduciría ambas cantidades en, aproximadamente, un litro. «Al trabajar, debemos obligarnos a beber periódicamente. No podemos esperar a sentirnos sedientos porque la deshidratación no avisa», recordó el especialista.
A corto y medio plazo, los problemas de salud más comunes por la toma escasa de agua es disminución de la movilidad, cefaleas, confusiones y, si se pierde más del 10% de la hidratación corporal, taquicardias y colapsos. A largo plazo, el cólico nefrítico, la cefalea crónico y los cánceres de colon y vejiga también se relacionan con beber poco.
Según el estudio “Rendimiento cognitivo e hidratación” publicado por la revistaJournal of the American College of Nutrition y elaborado por la española Ana AdánProfesora del Departamento de Psiquiatría y Psicobiología Clínica de la Universidad de Barcelona, la falta de reposición de líquidos influye en el rendimiento intelectual y físico.

El agua en la digestión

También en el proceso de digestión el agua es fundamental. Cuando comemos el organismo segrega en el estómago el denominado jugo gástrico, una solución muy corrosiva compuesta básicamente por ácido clorhídrico diluido y una enzima inactiva llamada pepsinógeno que se transforma en pepsina y tiene como función descomponer las proteínas en elementos más pequeños -los péptidos- para proceder a su metabolización. Luego, a medida que el estómago hace su trabajo, las porciones no metabolizadas son trasladadas al intestino delgado a través de otra válvula: el píloro. Sólo que antes de pasar al intestino delgado el páncreas segrega -además de dos enzimas (la amilasa y la lipasa) y dos proteasas (la tripsina y la quimotripsina) que continúan con el proceso digestivo- una solución bicarbonatada para alcalinizar el entorno y contrarrestar la acidez con la que llega el alimento del estómago.

Pues bien, para fabricar esa solución bicarbonatada el páncreas necesita una gran cantidad de agua circulante. Y cuando el cuerpo está deshidratado eso no es posible con lo que el proceso digestivo no puede realizarse de forma eficiente.

En otras palabras, cuando el cuerpo está deshidratado, cuando tiene escasez de agua, no hay garantía de que el jugo gástrico sea neutralizado debidamente.

Dicho esto, hay que añadir que la falta de agua provoca también otras dolencias. Es el caso de la colitis -o inflamación de colon- y del estreñimiento al que frecuentemente va asociada. Una situación que se agrava cuando, comida tras comida, seguimos sin beber suficiente agua y se acumulan en el intestino grueso las heces endurecidas (lo que llamamos estreñimiento). Proceso que con el tiempo termina causando dolor e inflamación en el colon -a veces con infección- y que es lo que conocemos como colitis.

Artritis

Para la Medicina convencional la artritis es una enfermedad producida por la alteración patológica del cartílago -uno de los tejidos que forman las articulaciones-, lo que provoca dolor e hinchazón en las articulaciones que, con el paso del tiempo, pueden llegar a lesionarse gravemente provocando artrosis, es decir, deformaciones de los huesos.

La Artritis Reumatoidea, en cambio, se achaca a un mal funcionamiento del sistema inmune y afecta más a menudo a las manos y los pies. También se cree que puede llevar a ella la gota, el lupus y la hepatitis viral.

Lo más grave, en cualquier caso, es que en realidad oficialmente se desconoce la causa -sólo hay elucubraciones- y el futuro de quienes padecen esta «enfermedad» es sufrirla de por vida consumiendo constantemente antiinflamatorios, analgésicos y otros paliativos que engorden las cuentas de la industria farmacéutica.

Sin embargo, los millones de personas de todo el mundo que sufren alguna forma de artritis deberían saber que también en su caso el problema suele estar causado también por una deshidratación crónica. Los dolores en las articulaciones deberían de hecho considerarse meros indicadores de falta de agua en la superficie del cartílago de la articulación afectada. La superficie del cartílago de los huesos contiene mucha agua encargada de lubrificar las articulaciones y permitir que las dos superficies opuestas resbalen libremente entre sí durante el movimiento. Lo que permite a un cartílago bien hidratado que el deterioro a causa de la fricción sea mínimo.

En suma, para evitar la artritis lo que habría que hacer es tomarse en serio el primer dolor inicial, empezar en ese momento a ingerir suficiente agua diariamente y doblar suavemente y de forma constante las articulaciones para activar la circulación en la zona a fin de recuperar la movilidad. Y solo si el dolor no desapareciera en unos días, consultar al médico.

El lumbago

Obviamente, lo dicho es válido para las articulaciones vertebrales de la columna. Con la diferencia de que en ellas el agua no sólo lubrifica las superficies de contacto sino que la almacena en el corazón de los discos intervertebrales para así soportar la presión del peso de la parte superior del cuerpo. De hecho, se calcula que el 75% del peso de la parte superior del cuerpo es soportado por el volumen de agua almacenado en el núcleo del disco de la 5ª vértebra lumbar mientras el otro 25% es soportado por la materia fibrosa que existe alrededor de ese disco. Pues bien, cuando hay deshidratación los discos intervertebrales y las articulaciones de la columna están entre los primeros órganos afectados. Y que su valoración parece correcta lo indica que la afectación del 5º disco lumbar -cuya función es tan importante para mantenernos erguidos- suele producirse en el 95% de los casos de problemas de columna.

En definitiva, para evitar todo dolor de espalda beber bastante agua y hacer una serie de ejercicios a fin de crear un vacío intermitente que atraiga el agua dentro del espacio del disco.

La migraña

La migraña también suele deberse a la deshidratación, es un indicador de regulación crítica de la temperatura corporal. Es decir, es una dolencia que revela una especie de «estrés de calor».

Un exceso de mantas en la cama que no dejan que el cuerpo regule su temperatura durante el sueño, bebidas alcohólicas que provocan deshidratación celular -particularmente en el cerebro-, situaciones de alergia que hacen secretar histamina o un exceso de calor ambiental sin ingesta de agua son ejemplos típicos de ese «estrés de calor». Algo que se evita con la simple ingesta regular de agua. Y, en este caso concreto, de agua fría que baje la temperatura del cuerpo y del cerebro desde el interior y promueva el cierre del sistema vascular periférico cuya dilatación, es la causa desencadenante de la migraña.

La depresión y la fatiga crónica

Comúnmente se acepta que la depresión está asociada al estrés social, es decir, al temor, la ansiedad, la inseguridad, los problemas matrimoniales y emocionales persistentes…

La depresión -que no la tristeza, el decaimiento, etc.- es el resultado de una carencia de agua en el tejido cerebral. Aseveración que apoya explicando que el cerebro utiliza la energía eléctrica para funcionar y ésta se genera en el interior del cuerpo… merced precisamente a la circulación del agua. Consiguientemente, con la deshidratación el nivel de generación de energía disminuye, especialmente en el cerebro, por lo que muchas funciones cerebrales que dependen de ese tipo de energía se vuelven ineficaces.

Agregando que ese estado depresivo causado por la deshidratación es también lo que suele llevar al llamado Síndrome de Fatiga Crónica, afección que no sería sino una etiqueta puesta sobre una serie de problemas fisiológicos avanzados que se hallan asociados al estrés y, por ende, a la deshidratación crónica. Afirmación que apoya en el hecho de que en todos los casos que ha tratado, tras un periodo de tiempo corrigiendo la deshidratación y sus complicaciones metabólicas, el Síndrome de Fatiga Crónica mejoró de forma sorprendente.

El estrés

Cuando el cuerpo está deshidratado pone en marcha unos procesos fisiológicos similares a los que activa cuando está atendiendo una situación de estrés. Por eso para él la deshidratación causa estrés y el estrés causa una posterior deshidratación ya que agota las reservas de agua del cuerpo.

En cuando a los efectos de la cafeína y otros estimulantes es verdad que a veces pueden considerarse deseables pero el consumo constante de café, té o colas en sustitución del agua priva al cuerpo de su plena capacidad de formar energía hidroeléctrica. El exceso de cafeína anula la energía ATP almacenada en el cerebro y en el cuerpo por lo que es una de las principales causas que llevan tanto al llamado Déficit de atención como al Síndrome de Fatiga Crónica. Es más, un exceso de cafeína puede a largo plazo terminar cansado al corazón a causa de su excesiva estimulación.

Cabe agregar que algunos tests experimentales han demostrado que la cafeína perjudica la vista y a los componentes de la memoria que tienen que ver con la facultad de aprendizaje. De ahí que las personas afectadas de Alzheimer y los niños con dificultades para estudiar no debieran tomar café nunca.

Estas son las razones por las que no deberíamos descuidar nuestro consumo de agua, esperamos que esta información te sea de gran utilidad y te permita cuidar mejor de tu salud.

Todos estos consejos son solo orientativos y los pacientes con problemas de nutricion deben consultar a un nutricionista o dietista titulado para recibir las indicaciones dietéticas más adecuadas en cada caso. No inicie ninguna dieta no convencional sin consultar previamente con un profesional de la salud.

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