Los síntomas de la deshidratación incluyen una boca seca y pegajosa, ojos hundidos, poca producción de lágrimas, poca o ninguna producción de orina y letargo.
El agua es fundamental para que el intestino realice correctamente su función, ya que la falta de líquido hace la digestión mucho más lenta y por este motivo se pueden formar acumulaciones de desechos o heces en el intestino grueso, lo cual provoca el tan molesto estreñimiento.
“El agua es vida”, seguramente hayamos escuchado esta expresión muchas veces y sepamos lo cierta que es. La misma no solamente resalta la importancia de que la consumamos, sino que ademas bebamos las cantidades necesarias que nuestro cuerpo necesita. Es normal que en las épocas frías reduzcamos nuestro consumo de agua sin darnos cuenta, por eso debemos estar muy atentos para evitar que suceda. Para eso existen ciertos indicadores que nos muestran cuándo nuestro cuerpo no tiene las cantidades de agua necesarias. ¡Te contamos cuáles son!
A continuación te resumimos las consecuencias más importantes cuando una persona tiende a beber poca agua:
- Falta de hidratación.
- Dolor de cabeza.
- Fatiga.
- Constipación
- Mareos
- Cambios de humor.
- Dolores musculares.
- Mal funcionamiento de los órganos.
- Acumulación de toxinas en nuestro organismo.
- Retención de líquidos.
- Riesgo de padecer deshidratación.
- Lumbago
- Depresión y fatiga crónica
Muchos de los síntomas que podemos presentar pueden ser muy fácilmente confundidos y atribuidos a otros problemas. Entre ellos encontramos al cansancio, cuando no estamos bien hidratados nuestro rendimiento físico y mental disminuye, favoreciendo la presencia de la fatiga. En estos casos por lo general bebemos café o alguna otra bebida estimulante, sin embargo, la próxima vez que te sientas así prueba beber agua, quizás esa sea la razón de tu cansancio.
Otra señal evidente es la piel seca, que puede confundirse fácilmente con la exposición al sol o las condiciones climáticas. También podemos presentar ojos hundidos y opacos, en el caso de que no brillen y estén un poco oscuros, entonces es probable que estemos sufriendo de deshidratación.
También puede que nos sintamos constipados o mareados y con dolor de cabeza, esto último se debe a que la presión baja cuando no tenemos suficiente líquido en el organismo.
Estos son los síntomas que podemos llegar a sentir, por tanto, recordemos que la sed no es el único indicador de que necesitamos beber agua y estemos atentos a estos síntomas, ya que es de gran importancia mantener al cuerpo hidratado en todo momento y nuestra salud.
Carencias por falta de agua en el cuerpo
- Nos quita energía, ya que el agua favorece la vitalidad y reenergiza.
- Favorece la aparición de arrugas, ya que la piel se reseca. El agua es vital para mantenerse joven.
- Reduce los procesos de depuración del cuerpo.
- Tenemos más calor, ya que el cuerpo no puede cumplir con su función termoreguladora.
- Tenemos más hambre, ya que el agua produce saciedad.
- Retenemos más líquido: el agua es diurética, si no la tomamos, se nos hinchan las piernas, abdomen, etc.
- Gastamos menos calorías: el agua aumenta el gasto calórico y el metabolismo.
- Desprotegemos nuestro físico: el agua tiene efecto de amortiguación, en especial de las articulaciones y protege de traumatismos.
- Tenemos menos rendimiento en el gimnasio o en el deporte. Cuanto menos agua tomemos, menor será la performance deportiva.
- También afecta la capacidad intelectual.
- La falta de agua puede generar problemas de memoria y concentración.