Como sabemos, para mantenernos saludables es importante que llevemos una dieta equilibrada, lo cual quiere decir que debemos incluir todos los grupos de alimentos. Esto se debe a que cada uno aporta nutrientes diferentes necesarios para nuestra salud, hoy vamos a hablar específicamente sobre uno: el fósforo.
En varias ocasiones hemos mencionado su importancia, es importante tener en cuenta que un déficit de este mineral produce dolor, deficiencia corporal, poca flexibilidad articular, falta de apetito, poca resistencia a las infecciones. Para evitar estos problemas debemos consumir 700 mg diarios. Es importante que tampoco nos vayamos al otro extremo consumamos más de lo necesario, ya que un exceso también ocasiona diferentes problemas.
Podemos encontrar fósforo en alimentos tanto de origen mineral como vegetal, a continuación vamos a darte una lista de los alimentos que lo contienen:
– Frutas, como las uva pasa, ciruela seca, higos secos, dátil seco, coco.
-Verduras y hortalizas, guisantes, alcachofa, champiñon, col, brotes de soja, perejil.
– Lácteos y derivados, todos los quesos, leche en polvo.
– Cereales y derivados, avena, harina de trigo, pan integral, arroz blanco e integral, pasta.
– Legumbres, soja en grano, lentejas, judías, habas, garbanzos.
– Frutos secos, pistacho, almendra, cacahuete, nueces, piñones, almendra, avellanas, castañas.
– Carnes, caza y embutidos, hígado, pavo, pato, caballo, buey, lomo embuchado, gallina, conejo, liebre, sesos de ternera.
– Pescados, mariscos y crustáceos, bacalao seco, gambas, truchas langostinos, lenguado, salmón, sardinas, mejillón, almejas, atún arenque, besugo, gallo.
– Huevos, Huevo entero, yema.
Estos son los alimentos que lo contienen, como vemos, podemos obtenerlo de muchas fuentes diferentes, por lo que es raro que tengamos un déficit del mismo. Esto es todo lo que teníamos para contarte. ¡Esperamos que esta información te sea de gran utilidad!
Todos estos consejos son solo orientativos y los pacientes con problemas de nutricion deben consultar a un nutricionista o dietista titulado para recibir las indicaciones dietéticas más adecuadas en cada caso. No inicie ninguna dieta no convencional sin consultar previamente con un profesional de la salud.
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