Durante el embarazo el cuerpo va teniendo diferentes cambios físicos, esto afecta directamente el dormir, muchas veces no se puede conciliar el sueño por no encontrar la mejor postura para dormir en el embarazo. Pero antes de saber cuál es la mejor posición para dormir, es bueno adquirir buenos hábitos para descansar bien, por eso es necesario seguir un horario para dormir, tratando de que este sea regular; lo aconsejable es acostarse y levantarse en lo posible a la misma hora cada día.
También es bueno establecer una rutina para seguir antes de dormir, lo mejor es practicar ejercicios de relajación durante 20 a 30 minutos antes de ir a la cama, aunque leer o darse un baño también puede ayudar. Para facilitar el sueño, el dormitorio debe ser un santuario para dormir y esto se logra manteniendo el cuarto fresco, ya que las embarazadas sienten más calor de lo normal, además es bueno bloquear la luz y el ruido para que no interrumpan el sueño.
Postura para dormir en el embarazo cual es la mejor para descansar
La mejor postura para dormir en el embarazo es sobre el lado izquierdo, ya que ayuda a que los nutrientes y la sangre fluyan hasta el útero y el bebé; ayudando además a los riñones a eliminar fluidos y desechos. Siendo una posición que además ayuda a dormir mejor cuando la barriga está más grande, pudiendo acomodar el cuerpo con un cojín o almohada entre las rodillas, las que deben estar un poco flexionadas.
Esta es una posición que ayuda a liberar la gran presión que ejerce el útero sobre los vasos sanguíneos, además de aliviar la presión en la vejiga, nervio ciático y ayuda disminuir las molestias en la espalda. Aunque es muy difícil adoptar la misma postura para dormir en el embarazo todos las noches, al momento de elegir la mejor posición, esta facilita el descanso, el flujo sanguíneo y la estabilidad corporal.
La mayoría de las embarazadas sufren trastornos del sueño hacia el tercer trimestre de gestación, donde aparece el insomnio y la incomodidad para obtener un buen descanso. Donde dormir sobre el lado izquierdo del cuerpo ayuda a combatir esto, pero también existen otras posiciones para dormir en el embarazo que pueden ayudar a conciliar el sueño, como aquellas que necesitan almohadones especiales en forma de triángulo que ayudan a poyar el vientre y se apoyan entre los muslos.
Hacia final del embarazo se utilizan mucho estos almohadones, ya que la cabeza del bebé se encuentra apoyada entre los huesos de la pelvis. Además si durante el embarazo se sufre de acidez estomacal estas almohadas al ayudar a elevar la parte posterior del cuerpo son muy útiles, pero se debe considerar que el colchón debe ser recto y firme, no teniendo forma de hamaca y ser suficientemente mullido para que se adapte a las curvas de la columna.
Consejos para dormir bien durante el embarazo
Aunque encontrar una buena postura para dormir en el embarazo es necesario e importante, también es bueno adoptar algunos hábitos durante el día para que conciliar el sueño por la noche no sea tan complicado. Beber muchos líquidos durante el día es necesario para dormir mejor, pero no antes de dormir; beber agua ayudará que el cuerpo elimine toxinas, se puedan trasportar nutrientes a las células y ayudará a mantener los tejidos de las orejas, nariz y garganta bien húmedos.
La acidez estomacal es otra de las causas que afectan el sueño de las embarazadas, siendo necesario evitar el consumo de alimentos picantes, fritos o ácidos como el tomate, para evitar estas molestias estomacales; además durante las noches se debe dormir con la cabeza elevada entre almohadas para facilitar el sueño. El ejercicio físico también es necesario para conciliar el sueño por las noches, esto ayudará a mantener el cuerpo saludable, mejora la circulación, reduce la hinchazón, los calambres, los dolores en las piernas y espalda; ejercicios que deben ser moderados. Pero sin duda uno muy bueno y completo durante el embarazo es la natación.
Los masajes también son recomendables durante el embarazo, los que son recomendables después de la ducha, algunos aceites esenciales como el de naranja, sándalo, limón y mandarina son buenos durante los primeros cuatro meses de embarazo; mientras que los aceites de tomillo, rosa, romero y lavanda son especiales para después de los seis meses de embarazo. Masajes que relajarán el cuerpo y además nutrirán la piel.