Lactancia materna, clave de la salud infantil. La leche materna es el alimento ideal para los recién nacidos, que proporciona los nutrientes necesarios para un correcto desarrollo; además contiene anticuerpos que ofrecen protección contra las enfermedades comunes de la infancia.
La lactancia es el elemento clave porque asegura la aportación de los nutrientes adecuados y es la vía para prevenir enfermedades en el futuro, como la obesidad, diabetes, hipertensión, enfermedades alérgicas y el reflujo por citar algunas. Es importante que las madres conozcan todas las particularidades de la lactancia, que la leche materna es un producto rico en elementos que favorecen el desarrollo del bebé, por lo que es importante fomentar la lactancia materna, ya que es la mejor opción para asegurar que los niños empiecen la vida adecuadamente.
Durante los proimeros meses de vida del bebé, es fundamental la alimentación exclusiva con leche materna, para mejorar el estado nutricional del niño, ya que la leche contiene cantidades apropiadas de carbohidratos, proteínas, grasa, y suministra minerales, vitaminas y las hormonas necesarias para el bebé.
Cabe decir que la leche materna es una alternativa económica que a su vez, protege el medio ambiente porque no genera deshechos para su producción y siempre está lista en la cantidad y calidad necesarias, por lo que se recomienda que la mejor opción a la hora de alimentar al bebé, es la lactancia.
Beneficios para el bebé
• La leche materna se digiere fácilmente y proporciona, en su justa medida, los nutrientes, vitaminas, proteínas, grasas y anticuerpos esenciales que necesita el bebé para desarrollarse físicamente y neurológicamente.
• Cada vez más las investigaciones demuestran que la lactancia materna favorece un desarrollo óptimo del cerebro.
• La leche materna contiene más de 200 agentes inmunológicos que la ciencia no puede reproducir.
• Las investigaciones demuestran que la lactancia materna ayuda también a proteger al bebé frente a las alergias, reduce el índice de enfermedades graves y las probabilidades de que se ponga enfermo.
• La lactancia materna contribuye a un desarrollo oral óptimo y disminuye el riesgo de caries.
• El contacto con la piel de la madre crea un estrecho vínculo entre la mamá y el hijo y le da al bebé una mayor sensación de bienestar y seguridad.
El calostro que la madre ofrece tempranamente a su hijo o hija aportándole todos los elementos necesarios para nutrirlo y protegerlo contra las infecciones y enfermedades.
La leche materna le aporta al niño y a la niña las defensas que le protegen de enfermedades infecciosas por lo cual se le ha llamado la primera vacuna.
La leche materna es la mejor protección para el niño contra las diarreas y la deshidratación; las infecciones respiratorias tales como la bronquitis y la neumonía, el estreñimiento, los cólicos, las alergias, las enfermedades de la piel, el sarampión, la desnutrición, la diabetes juvenil y la deficiencia de micronutrientes.
Iniciar la lactancia materna inmediatamente después de dar a luz hace que el útero se contraiga y prevenga las hemorragias, una de las mayores causas de muerte materna en muchos países. Amamantar ayuda a que la madre regrese a su peso normal más rápido y la previene del cáncer de mama y de ovario.
Las madres que amamantan en forma exclusiva durante los primeros cuatro a seis meses de vida del bebé pierden peso con mayor facilidad.
Ayuda a la madre a conocer mejor a su hijo o hija y esto fortalece el vínculo afectivo que motiva a un mejor cuidado y provee beneficios psicológicos en la vida del ser humano.