Cada persona adopta una forma diferente de vivir en su rutina diaria, es decir, muchas personas se dejan tentar por la comodidad y el confor del sofá en el salón de casa y el mando a distancia. Observan la vida desde la pasividad que implica disfrutar un programa de televisión tras otro. Por el contrario, otras personas también pueden llegar a rozar la obsesión con la actividad. Este es el caso, de los adictos al deporte, de aquellas personas que pasan horas interminables en el gimnasio y cuidan su cuerpo pero no cultivan su mente ni su espíritu. Disfruta de tu felicidad.
Tener unos hábitos de vida activa es más que necesario a cualquier edad, es decir, en la madurez pero también, en la juventud y en la vejez. Implica realizar ejercicio físico con regularidad puesto que el deporte fomenta la alegría y las ganas de vivir. El deporte debe ir acompañado por una dieta sana y equilibrada, en concreto, por la Dieta Mediterránea que es fuente de salud. Por otra parte, merece la pena que te animes a disfrutar del placer de la lectura para enriquecer y cultivar tu mente.
Conocer nuestras posibilidades y nuestras limitaciones, interiorizar normas básicas dealimentación e higiene, fomentar el interés por la vida activa y la práctica de deportes, la importancia de una vida social activa, la autonomía personal, el cuidado de la autoestima, etc… todo ello forma parte de los ingredientes básicos para edificar, con cimientos sólidos, una vida sana y plena.
Ahora que acabamos de celebrar San Jordi es buen momento para sentir la magia que existe detrás de una historia en la ficción. Además, debes alejarte de hábitos poco adecuados como, por ejemplo, el tabaco y también, claro está, el abuso del alcohol que aumenta de forma alarmante entre la gente joven que bebe más de la cuenta durante el tiempo de ocio del sábado por la noche.
Las conclusiones de los dos estudios son tajantes: cambiar una vida sedentaria por una activa es una medida que sólo aporta beneficios. Para el doctor Anderson no hay duda: Los pacientes tienen que incoporar alguna actividad física regular a sus hábitos diarios.
Deben tener en cuenta que cualquier tipo de ejercicio, incluso si no se realiza con regularidad, es mucho mejor que no hacer nada».Para la doctora Dunn y sus colegas, el mensaje que hay que transmitir tiene que ser también de este tipo. Si estas medidas se generalizasen, sus consecuencias positivas tendrían un impacto favorable en los esfuerzos de la salud pública por reducir la prevalencia de los estilos de vida sedentarios».
Además, también debes cuidar de una forma muy especial tus relaciones sociales y tus lazos de amistad con tus amigos.
Imagen: Flickr-Mauricio Macri