¿Qué tiene que ver Facebook con la anorexia, la bulimia, la obesidad y demás desórdenes alimenticios? Lamentablemente, mucho.
A la exposición frecuente a los medios de comunicación, que promueven un ideal de belleza perfecto pero inalcanzable a través de las publicidades o programas de televisión, esta red social se suma a la lista de influencias negativas para los adolescentes de hoy en día. Si tienes jóvenes en casa debes prestar mucha atención a sus hábitos alrededor del ordenador para estar alerta ante este peligro.
Según investigadores de la Facultad de Bienestar Social y Ciencias de la Salud de la Universidad de Haifa, en Israel, cuanto más tiempo pasa una adolescente en esta red social, mayores son sus probabilidades de contraer bulimia o anorexia, insatisfacción física, mala imagen de sí mismas, baja autoestima y una actitud negativa a la hora de alimentarse.
Por supuesto, navegar en Facebook no necesariamente desencadenará un mal alimenticio en nuestros hijos, claro está. Pero muchas veces es un detonante: además de ese ideal de belleza que las bombardea, las adolescentes se “encierran” en el mundo virtual. Y en consecuencia, muchos padres ignoran lo que les está ocurriendo.
Está comprobado que los padres pueden evitar un desorden alimenticios en sus hijos involucrándose en los hábitos de los adolescentes frente al ordenador. Estar cerca de ellos es la clave.
Cuanto más tiempo pasan las chicas adolescentes en Facebook, más posibilidades tienen de desarrollar una imagen negativa de su propio cuerpo, así como diversos trastornos de la alimentación, como la anorexia o la bulimia.
Esto es lo que ha revelado un estudio de la Universidad de Haifa, en Israel, en el que se examinó el efecto de los medios de comunicación en el desarrollo de trastornos alimenticios. En el estudio participaron 248 chicas de edades comprendidas entre los 12 y los 19 años.
La investigación demostró asimismo que cuanto mayor es la exposición de las jóvenes a contenidos musicales o de moda a través de Internet, y a ciertos programas de televisión (como series del tipo “Gossip Girl”), también es mayor la posibilidad de que las niñas desarrollen anorexia y otros trastornos alimenticios.
En este contexto, los padres juegan un papel fundamental, afirman los investigadores. El estudio reveló que las hijas de padres pendientes del uso que éstas dan a los medios, de lo que sus hijas ven, o dispuestos a discutir con ellas los contenidos, presentan una mayor fortaleza personal que ejerce de protección contra este tipo de trastornos.