El pilates es un sistema de ejercitación que tiene muchas variantes. Algunos ejercicios de pilates requieren de aparatos pero muchos otros los podemos practicar en casa sin necesidad de ningún elemento. Los ejercicios de pilates en casa pueden ser una excelente forma de mejorar nuestra salud, otorga un equilibrio corporal y mental que puede ayudarnos mucho en el tratamiento de algunos trastornos de la salud.
El método pilates se centra en la idea de que con la mente se puede controlar nuestro cuerpo. Por ello, cuando hagas pilates ten en cuenta estos aspectos:
- Respiración: para respirar debes inhalar el aire por la nariz, cerrando la boca para evitar que este entre por esta vía. A la hora de introducir el aire en el cuerpo, tienes que mantener los músculos abdominales en tensión. Intenta mantener el mismo ritmo de respiración lento durante la ejecución de los ejercicios.
- Concentración: tienes que estar concentrado para hacer pilates en casa de forma correcta. Por ello, aíslate en una habitación y ejecuta los ejercicios en silencio. Si ello te ayuda a concentrarte, puedes emplear música.
- Zona abdominal y lumbar: en el método pilates se considera que la zona abdominal y lumbar conforman una especie de centro de poder que, si está suficientemente reforzado, permite que el cuerpo se mueva de forma equilibrada.
Ejercicios de pilates para la cintura
Además de fortalecer y tonificar los músculos y articulaciones de cintura afecta positivamente los abdominales y la cadera. También se logra potenciar el sentido del equilibrio interno.
Se comienza en posición acostados de un lado del cuerpo con el brazo extendido de manera que la cabeza se apoya en el brazo, las piernas extendidas una sobre otra formando todo una línea recta. El movimiento se realiza elevando la cintura lo más posible exhalando al mismo tiempo. Repetimos diez veces antes de cambiar de lado.
Para el Vientre: Acuéstate boca arriba, dobla las piernas hacia el pecho y agarra tus rodillas con las manos. Estira tu espalda lentamente. Junta tus piernas y elévalas hacia el techo y hacia adelante; estira los brazos hacia los lados y agítalos con movimientos rápidos, al mismo tiempo que inhalas y exhalas en cinco ocasiones.
Piernas circulares: Acuéstate boca arriba con las piernas dobladas en paralelo, apoyando los pies sobre la colchoneta. Flexiona una pierna hacia el pecho y después estírala como si quisieras tocar el techo con la punta del pie, mantén los brazos y las palmas de la mano extendidas sobre la colchoneta, junto al torso y la nuca también estirada. Flexiona otra vez la rodilla hacia el pecho, estira bien la espalda y agarra la pierna con las manos y vuelve a la posición inicial. Haz 10 series alternando la pierna.