Cuando se hablan de cosas que engordan, las personas suelen solo pensar en comer en exceso y llevar una vida sedentaria, sin embargo, con el paso del tiempo y los avances modernos de la ciencia, cada vez se conocen más cosas que realmente pueden afectar a nuestro peso, cosas que realmente son llamativas, simplemente porque todos hacemos alguna de las cosas que se analizaran en esta especie de lista.
Cosas que engordan según estudios científicos
Consumo Excesivo de Calorías:
La ganancia de peso ocurre cuando se consume más energía de la que se gasta. Alimentos ricos en calorías, especialmente aquellos con bajo contenido nutricional, pueden contribuir a un exceso calórico.
Azúcares y Endulzantes Artificiales:
El consumo elevado de azúcares añadidos, presentes en alimentos procesados y bebidas azucaradas, se ha asociado con la ganancia de peso. Además, algunos estudios sugieren que los endulzantes artificiales podrían afectar negativamente al metabolismo.
Grasas Trans y Grasas Saturadas:
Las grasas trans, presentes en alimentos procesados y fritos, así como las grasas saturadas, que se encuentran en carnes grasas y productos lácteos enteros, han sido relacionadas con un mayor riesgo de ganancia de peso y problemas de salud.
Alimentos Ultraprocesados:
Los alimentos ultraprocesados a menudo son altos en calorías, azúcares añadidos, grasas poco saludables y sodio. Su consumo regular se ha vinculado con un mayor riesgo de obesidad.
Falta de Fibra:
Las dietas bajas en fibra pueden contribuir al aumento de peso. La fibra ayuda a la saciedad y al control del apetito, y se encuentra en frutas, verduras, legumbres y granos enteros.
Falta de Actividad Física:
La falta de ejercicio y un estilo de vida sedentario pueden dificultar el equilibrio energético, favoreciendo la ganancia de peso.
Falta de Sueño:
La falta de sueño se ha asociado con cambios en los niveles de hormonas que regulan el apetito, lo que puede aumentar los antojos de alimentos ricos en calorías y contribuir al aumento de peso.
Consumo Excesivo de Alcohol:
El alcohol aporta calorías vacías y puede aumentar el apetito, llevando a un mayor consumo de alimentos.
Tomar fotografía a los alimentos:
Esta es de las cosas que engordan que tienen una explicación simple. Hay que considerar que con la masificación de las redes sociales, muchas personas terminaron sacándole fotografía a sus alimentos, en un acto que puede ser criticado e incomprendido por muchos, pero la ciencia encontró una explicación detrás de esto y es que las personas que hacen esto, lo hacen porque este tipo de acto estimula los deseos de comer en el cerebro.
Básicamente, al generar placer en el cerebro, será una costumbre que las personas lo hagan sin saber realmente que esto despierta el apetito en sus cerebros, lo que como sabrás, llevara a que se coma más.
Esto también explica que cuando navegamos por la Internet y nos encontramos con la imagen de algo sabroso, nos gustaría comer dicho alimento, todo es culpa de los instintos primitivos del cerebro.
El pasar mucho tiempo en la cocina:
La lógica nos dice que la familia debería pasar gran parte de su tiempo junta en la sala de estar, sin embargo, hay ciertas cocinas que tienen un gran tránsito, por lo general, aquellas que son muy amplias y cuentan con una mesa y sillas.
Cuando hay mucho tránsito en nuestra cocina, bueno, los habitantes del hogar se sentirán estimulados sin si quiera percatarse, a consumir más alimentos.
Consumir alimentos y bebidas en recipientes de plásticos:
Hay múltiples investigaciones que han encontrado una serie de compuestos dentro de los recipientes de plásticos, los cuales afectan en cómo responden ciertas hormonas en nuestro cuerpo, especialmente aquellas que están relacionadas con el sistema endócrino, haciendo que el metabolismo de nuestro cuerpo sea más lento, algo que como sabemos, hará que se quemen calorías más lentamente.
Otro factor que afecta a nuestro metabolismo, es el verse expuesto por mucho tiempo a la luz artificial. Hay que considerar que para que nuestro cuerpo pueda descansar, necesita de una oscuridad absoluta, la cual suele llegar por las noches, sin embargo, con la invención de la electricidad, bueno, se ha transformado en algo común que nos quedemos despiertos hasta altas horas de la noche viendo televisión, jugando videojuegos o en las redes sociales por medio de nuestro teléfono.
Este tipo de acto, genera que se pierdan horas de descanso, lo que se traduce en un metabolismo más lento, lo que como antes fue señalado, hará que las calorías se quemen más lentamente y también se puede reflejar en que tendremos menos energía.
Los refrescos de dieta:
Muchos piensan que los refrescos de dieta son más saludables que los refrescos tradicionales, sin embargo, en realidad no son tan saludables, después de todo, las empresas necesitan compensar el uso de endulzantes de alguna manera, algo que logran con ciertos compuestos que suelen ser incluso hasta más nocivos para la salud.
Con el paso del tiempo, se ha descubierto que un montón de refrescos de dieta en realidad aportan más calorías que los refrescos tradicionales. Es cierto que pueden tener menos cantidades de azúcar, pero tienen dosis más altas de otros edulcorantes.
Ver programas de cocina:
Este tipo de efecto en el cerebro es muy similar a lo que sucede cuando le tomamos una fotografía a nuestra comida, es decir, el ver comida despierta un instinto primitivo en nosotros. Al ver comida, siempre querremos comer, incluso cuando no tengamos hambre.
Para evitar este tipo de efecto en el cerebro, podríamos dejar de sacar fotografías a nuestra comida por ejemplo, o cuando veamos un programa de televisión de cocina, tener un poco de fruta cerca, ya que de igual manera nos invadirán los deseos de comer, incluso si no tenemos hambre, por ende, siempre será mejor comer algo saludable para controlar este tipo de instinto en el cerebro. Un par de frutas que son recomendadas para tener siempre a mano, son las manzanas y las uvas.
El trabajo de noche
Trabajar de noche nos hace aumentar de peso, y no necesariamente porque comamos mas, mas bien se debe a que se altera el ritmo circadiano. Los humanos biológicamente estamos programadas para dormir cuando no hay luz y comer de día. «El trabajo por turnos durante la noche interrumpe el sueño y rompe el ciclo fisiológico y esto provoca una disminución del gasto energético diario total».
Bebidas y zumos azucarados.
Según estudios científicos se revela que las personas que beben en exceso gaseosas y zumos azucarados pueden incrementar el peligro de sufrir obesidad, desarrollar diabetes tipo II, enfermedades cardíacas y gota.
Incluso las mujeres que consumen uno o más de estos duplican el riesgo de manifestar diabetes, en comparación con las que no lo hacen.
También se incluyen los Dulces, postres y caramelos, las galletas, los pasteles, las donas y los bizcochos.