Los ardores de estomago en el embarazo suelen ser muy comunes porque cuando el bebé empieza a crecer el resto de los órganos de la mujer deben moverse y quedar más apretados para permitir espacio suficiente para el crecimiento del niño o niña. Esto hace que el estomago esté más arriba y que cuando comas algo, el ácido usado para digerir estará más arriba, creando estos ardores.
Sin embargo, a pesar de ser muy desagradable no es algo que no podamos tratar. Al menos hay algunas cosas que puedes hacer para bajar la frecuencia y reducir el dolor que causa el ardor. De esto te hablaré al saltar.
Lo primero que debes hacer y también lo más importante es evitar comer cosas que te causen ardores. Por ejemplo los cítricos, los tomates, la salsa de tomate, el chocolate, cebollas, pimientos, café y picantes son terribles para esto porque de inmediato te causarán ardor estomacal. También debes alejarte de comidas con mucho vinagre, como la mostaza, algunos aderezos de ensalada y los encurtidos.
Si ya tienes los adores entonces puedes tomar un vaso de leche, que te relajará bastante y además de ser buena para esto también lo es para aportar calcio y proteínas para ti y para el bebé. Cada vez que sientas un episodio de ardores, toma leche que puede ser completa o descremada, dependerá de la dieta que estés llevando durante el embarazo.
1. Procura comer poco y a menudo. Evita que el estómago se llene demasiado de golpe.
2. Elige tus alimentos. Los alimentos grasos o fritos, el tomate, cebolla, ajo crudo, cítricos, los embutidos, ahumados, picantes, y el café favorecen los ardores. En cambio, la leche fría, el arroz, la pasta y los alimentos asados o al vapor se toleran mejor.
3. Mastica los alimentos lentamente para facilitar su digestión.
4. No los ingieras ni muy fríos ni muy calientes.
5. No te tumbes después de las comidas. Por tanto, cena 2-3 horas antes de acostarte y evita las siestas. También te ayudará elevar un poco la parte superior de la cama con unas almohadas para dormir algo incorporada.
6. No practiques deporte hasta que la digestión haya terminado.
7. Cuando notes que te va a venir la acidez, bébete de golpe un poco de leche fría. Si lo haces cuando ya te ha aparecido el ardor, no te servirá de nada.
8. Consulta con tu ginecólogo si a pesar de estas medidas, notas el ardor.Te prescribirá un antiácido específico para tu estado. No recurras al bicarbonato sódico ya que éste puede favorecer la retención de líquidos, nada deseable en tu estado.
Finalmente, también puedes usar un antiácido suave si no te gusta la leche, pero lo mejor es que preguntes a tú médico cuál puedes usar que sea seguro para que te diga cuál marca será mejor para ti.