Síntomas de anemia en el embarazo, consecuencias y tratamientos
Hoy nos ocuparemos de una afección muy frecuente durante el embarazo: la anemia por deficiencia de hierro. Éste es un tema de control obligado ya que no tratar este problema puede ocasionar problemas de salud muy graves tanto en el bebé como en la madre. Aquí encontraréis una breve guía con la información más relevante al respecto.
La anemia es una afección causada por la baja cantidad de glóbulos rojos de la sangre o por su baja cantidad hemoglobina (una proteína presente en los glóbulos rojos), cuya función es transportar el oxígeno a diferentes tejidos y órganos del cuerpo. Para que el organismo pueda producir la cantidad necesaria tanto los glóbulos rojos como de hemoglobina, el cuerpo requiere de ciertas vitaminas y de hierro.
Cuando estamos embarazadas, aumenta el volumen de sangre ya que nuestro bebé obtendrá de ella los nutrientes necesarios para su crecimiento. Entre ellas, consumirá enormes cantidades de hierro, pudiendo ocasionar que no tengamos suficiente cantidad para que nuestro organismo produzca glóbulos rojos y hemoglobina en forma adecuada.
El problema de la anemia por deficiencia de hierro es usual entre las embarazadas, especialmente si se dan durante la gestación otras situaciones como: vómitos frecuentes, embarazos anteriores recientemente, o una alimentación baja en hierro.
Los síntomas de la anemia son variados, y no necesariamente se dan en forma combinada: cansancio fácil, debilidad, dolor de cabeza, agitación, fatiga, mareos, dificultad para respirar, frecuencia cardíaca aumentada, baja concentración, falta de memoria y calambres en las pantorrillas.
Muchos de los síntomas de la anemia por deficiencia de hierro se asemejan a los síntomas del embarazo, por ello es fundamental realizar las pruebas de diagnóstico necesarias para la detección de esta enfermedad. Dentro de los controles del embarazo, deberás realizarte diferentes análisis de sangre y con ellos tu médico podrá chequear cuál es el estado de tus glóbulos rojos.
En caso de padecer anemia en el embarazo, el tratamiento es muy simple. Consiste en la administración de un suplemento de hierro a través de pastillas o inyecciones, según prescripción del médico. A su vez es muy importante consumir alimentos ricos en hierro, tanto para tratar el síndrome anémico como para prevenirlo:
- carnes rojas y las vísceras (principal fuente de hierro),
- carnes blancas (en menor cantidad que las rojas),
- vegetales como el brócoli, la espinaca y las lentejas.
Recuerda que ante cualquier duda o síntoma debes consultar con tu médico en forma inmediata, de esta forma resguardarás tu salud y la de tu hijo y podrás gozar de un embarazo saludable.
¿Cómo se diagnostica?
La anemia, generalmente, se descubre durante el control prenatal, mediante un análisis de sangre rutinario indicado para verificar los niveles de hemoglobina o hematocrito. La hemoglobina es la parte de la sangre que distribuye el oxígeno de los pulmones a los tejidos del cuerpo, mientras que los hematocritos miden el porcentaje de glóbulos rojos que se encuentran en un volumen específico de sangre. Se deben realizar como mínimo dos controles de hemoglobina durante el embarazo y si el nivel es inferior a 10 g% se debe iniciar tratamiento.
¿Cuál es el tratamiento?
El tratamiento específico será determinado por tu médico dependiendo del estado general de tu salud, antecedentes médicos y tolerancia a ciertos medicamentos.
De todos modos, para combatir la anemia por deficiencia de hierro el profesional incluirá en tu dieta suplementos de este compuesto. Algunas de las formas de administración son de dosificación lenta, mientras que otras deben administrarse varias veces por día. Es bueno que sepas que si el hierro se toma con el jugo de un cítrico o si lo consumes junto a otros alimentos que contengan vitamina C, el organismo lo absorberá mejor.
Si la anemia se instala bruscamente por hemorragias abundantes durante el embarazo como por ejemplo por una complicación como la placenta previa o bien en el parto y tu hemoglobina tiene un nivel tan bajo que impide una movilidad normal, es indicación de realizar una transfusión sanguínea.
¿Cómo puede prevenirse?
Una buena nutrición antes del embarazo puede ayudar no sólo a prevenir la anemia sino también a la formación de otras reservas nutricionales en el cuerpo de la madre. Una dieta saludable y equilibrada durante el embarazo permite mantener los niveles requeridos de hierro y otros nutrientes de importancia necesarios para la salud tanto de la madre como del bebé en gestación.
EStoy embarazada de 25 semanas y estoy padeciendo de anemia por falta de hierro, me mandaron 10 inyecciones para aumentar mi hemoglobina, excelente articulo aclaro algunas dudas que tenia gracias a los examenes pude darme cta. lo que estaba padeciendo..!!