Una buena alimentación juega un papel fundamental en nuestra salud cardiovascular. La prevención de muchas de las enfermedades más típicas y comunes de la actualidad (la hipertensión, la diabetes, el colesterol, o factores de riesgo asociados con la obesidad) van de la mano con la ingesta de alimentos malos para nuestro organismo.
Sin embargo, una buena alimentación es una de las tareas más complicadas de llevar, en especial con la gran cantidad de malos hábitos que generalmente adquirimos, sin mencionar la gran cantidad alimentos ricos en grasas que habitualmente consumimos.
Hoy en OtraMedicina te mencionaré algunos de los alimentos más recomendados para beneficiar la salud de nuestro corazón. Así que, ¡presta mucha atención! e incorpora todos estos alimentos a tu dieta para comenzar a disfrutar de una buena calidad de vida.
Alimentos buenos para el corazón
Frutos secos
Los frutos secos son uno de los alimentos más sanos y deliciosos. Éstos no solo aportan nutrientes fundamentales para el beneficio de un correcto funcionamiento del sistema cardiovascular, sino que también aportan grasas poliinsaturadas, destacándose por ejemplo; el ácido linolénico de las nueces como uno de los más importantes. Por supuesto son alimentos completamente naturales, es decir, sin manipulación del ser humano, son frutos ricos en proteínas, y completamente enérgicos.
Aceite de oliva extra virgen
El secreto del aceite de oliva también son los ácidos grasos. Se encuentran instaurados por la vitamina E (también fundamental para la piel), ácidos oléicos, y otras sustancias que ayudan a la reducción del colesterol en la sangre.
Mi recomendación es sustituir el aceite tradicional por el aceite de oliva en todas las comidas que realices. Su sabor en comienzos puede resultar menos sabroso que el del aceite común, pero utilizándolo como recurso frecuente en cada una de tus comidas, sin duda no te costará demasiado acostumbrarte a su sabor.
Una de las comidas más sanas para nuestro corazón es pescado a la plancha con aceite de oliva extra virgen, los aportes de ácidos grasos del aceite, junto al Omega 3 del pescado se transforman en la combinación perfecta para reforzar nuestra salud.
Alimentos con fibra
Son de lo más fundamentales. Éstos ayudan a bajar el nivel de colesterol que se encuentra en la sangre, y contribuyen para lograr una sana y correcta alimentación. Las hortalizas, las verduras, el pan, el arroz, los cereales, los cereales integrales, los frutos secos, y las legumbres son algunos de los alimentos más provechosos.
Lo mejor de todo es consumirlos en el desayuno, y extraer todas sus vitaminas y proteínas para transformarlas en la energía que gastaremos posteriormente en el día. Se trata de una de las dietas más utilizados por deportistas profesionales para mantener sus niveles energéticos equilibrados, sin mencionar que es una buena dieta para personas que se encuentren activas la mayor parte del día.
Que nunca falten los ingredientes para un corazón saludable:
- Frutas y verduras frescas o congeladas sin azucarar.
- Alternativas lácteas y no lácteas bajas en grasas y no hidrogenadas.
- Frutos secos y semillas crudas y variadas.
- Aceites variados: de oliva, canola, nuez, cacahuate o maní y sésamo; aerosoles para cocinar sin materias grasas y sustitutos de grasas para hornear, como el puré de higos y la salsa de manzana.
- Vinagres variados: arroz, vino rojo, balsámico, sidra de la manzana y frambuesa.
- Hierbas, condimentos y especias de todo tipo: ¡deja volar tu imaginación!
- Edulcorantes artificiales o sustitutos del azúcar, como la miel y la stevia.
- Legumbres y cereales, de preferencia integrales, ya que son más saludables y contienen más fibras.
- Panes y pastas de harinas integrales, de soja (soya) o maíz.
- Salsas y conservas sin grasa o bajas en grasa y con la menor cantidad de sal o sodio posible.
- Sopas y caldos bajos en sodio.
- Comidas congeladas sin sal ni azúcar añadidas.
- Carne, aves de corral y sustitutos de carne, sin piel y con poca grasa.
- Pescados variados: como salmón, caballa, tilapia, trucha, arenques y atún.
Recuerda que el 80% de los infartos y de los accidentes cerebrovasculares (derrames cerebrales) prematuros pueden evitarse, entre otras cosas, con una dieta sana. Si la acompañas de una actividad física regular y evitas el consumo de tabaco o dejas de fumar, tu corazón, de seguro, estará más sano.
Y aun con estos cambios en tu estilo de vida, no dejes de controlar regularmente tu presión arterial, el nivel de azúcar en tu sangre y el nivel de lípidos o colesterol, que son de los principales enemigos del corazón.