Descubre cómo ciertos alimentos te ayudan a mejorar la memoria. Conoce opciones nutritivas que benefician tu capacidad cognitiva. ¡Optimiza tu dieta para potenciar tu rendimiento mental con estos alimentos para la memoria!
La memoria está determinada en gran parte por los genes, pero hay muchos factores, entre ellos la alimentación, que pueden ayudarte a cuidarla.
Afortunadamente existen ciertos alimentos que nos pueden ayudar a mejorar la memoria, la concentración, la coordinación y el razonamiento. Estos alimentos mantienen tu cerebro en estado de alerta y enfocado en las actividades.
Aquí te mostraré cuáles son esos magníficos alimentos para que prepares la dieta ideal para tu cerebro y la compartas con tu familia.
La manzana
Además de ser nutritiva y, por tanto, recomendable, tiene una capacidad antioxidante que protege al cerebro de trastornos neurodegenerativos. Sus beneficios están muy presentes en la pulpa y en la cáscara.
Los arándanos
Contienen antocianinas, un pigmento que además de proporcionarle su color, tiene la capacidad de reducir el daño progresivo del cerebro. Comer arándonos es muy beneficioso para mantener la mente joven y ayuda a prevenir la demencia senil.
Las moras y las fresas
Las primeras tienen un alto nivel antioxidante, estabilizan el azúcar en la sangre y ayudan a mejorar la memoria. Del mismo modo, las fresas también actúan como antioxidante. Por tanto, no olvides incorporar estas deliciosas frutas a tus postres. Además de disfrutar de su rico sabor, estarás beneficiando tu salud.
Las espinacas
Es una verdura que se recomienda sobre todo a los niños y, que está muy valorada porque es rica en luteína. Es una sustancia que protege a las células cerebrales del efecto degenerativo. Además, contiene ácido fólico, que ayuda a procesar la información más rápido. Por tanto, es una verdura ideal para estudiantes.
El apio
Entre sus componentes destaca uno llamado luteolina, que reduce los efectos negativos del envejecimiento. Al mismo tiempo, reduce la liberación de moléculas que inflaman el cerebro y provocan pérdidas de memoria.
El pescado
El salmón, la trucha, las sardinas o el atún aportan ácidos grasos Omega 3, que son muy importantes para el correcto funcionamiento del sistema nervioso. Ayudan a retrasar el deterioro de la memoria.
Huevos
Este es un alimento que mantiene el cerebro en estado de alerta y ayuda a la memoria a largo plazo gracias a un nutriente llamado colina el cual ayuda a mejorar el funcionamiento del corazón, de la membrana celular y la memoria.
Nueces
Además de ayudar a que te concentres y a respondas más rápido en tu trabajo y estudios, las nueces ayudan a que el cerebro funcione perfectamente.
Las nueces tienen las propiedades benéficas de las proteínas y también las virtudes de las grasas, así que no dudes en consumirlos para mejorar la memoria y la concentración.
Aguacate
Además de delicioso, el aguacate tiene un alto contenido de fibra y sodio, y está libre de colesterol.
Este rico fruto contiene además Omega 3, Vitaminas (A, C, D, E, K y vitaminas del complejo B), Grasas mono insaturadas, folato, Luteína, Ácido oleico y Potasio. Por su contenido alimenticio tan especial es considerado como el indicado par prevenir enfermedades como el Alzheimer.
Salmón
La principal atracción de este pescado de agua fría es su rica fuente de Omega-3. Se ha descubierto que estos ácidos grasos llevan al cerebro a su máximo rendimiento. Algunos estudios afirman que también ayuda y previene síntomas de la depresión, trastorno bipolar y demencia.
Sardinas
Una excelente fuente de ácidos grasos omega-3 y omega-6, que previenen distintas enfermedades.
Su consumo debe ser moderado ya que en demasía puede aumentar la tendencia a la depresión.
Sugerencias:
- Tenga en cuenta que el aceite de oliva virgen y el ajo crudo ayudan también a evitar los fallos de memoria.
- Tome habitualmente lecitina de soja. Se trata de un fosfolípido integrante de las membranas de las neuronas.
- Siga una dieta variada y rica en alimentos que contengan vitaminas del grupo B como cereales integrales, legumbres y frutos secos. Estas vitaminas son fundamentales para las funciones cerebrales. De hecho, varios estudios demuestran que incluso en forma de suplementos pueden ayudar mejorar nuestras funciones mentales.
- Reduzca o evite el tabaco, alcohol y las bebidas estimulantes.
- Evite el consumo excesivo de azúcar blanco y de aditivos como los colorantes ya que afectan al sistema nervioso y pueden alterar el comportamiento. Su excesivo uso está relacionado en el caso de los niños con la hiperactividad.
- Evite las hipoglucemias. Para ello deberá hacer cinco comidas diarias en horarios regulares y nunca comenzar las tareas diarias -trabajo, estudio, etc.- sin haber desayunado.
- Duerma el tiempo suficiente. Recuerde que las horas de sueño perdidas no son recuperables.
- Practique ejercicio o deportes suaves.
- Evite el consumo de «comida basura».
- Procure seguir una dieta rica en antioxidantes. Los más importantes son el betacaroteno (provitamina A) y las vitaminas B3, B6, B8, B12, C y E así como la Glutation Peroxidasa; lista a la que hay que añadir minerales como el cromo, el zinc y el selenio, el calcio y el magnesio.
Causas de pérdida de memoria
Edad avanzada
Como en el caso de otros órganos, el cerebro sufre las consecuencias del paso del tiempo y aparecen cambios que influyen de forma decisiva en la funcionalidad del mismo.
Enfermedad vascular cerebral
Todos sabemos que el cerebro necesita un buen riego sanguíneo así como oxígeno para mantener su actividad y capacidad. Los pacientes con este tipo de alteraciones pierden capacidad de concentración y memoria.
Hipotiroidismo
La alteración de las hormonas tiroideas está asociada a una pérdida progresiva de las funciones intelectuales superiores.
Infecciones
Existen agentes infecciosos del sistema nervioso que pueden dañar -en ocasiones de forma irreversible- esas capacidades.
Consumo de drogas y alcohol
El uso prolongado de estas sustancias está directamente relacionado con la pérdida lenta y progresiva de la memoria y las dificultades para la concentración.
Como es sabido se pueden dar diferentes grados de pérdida de memoria, pudiendo aparecer una pérdida selectiva de la memoria reciente y otras que tienen una pérdida de la memoria remota.
Cuando una persona no puede recordar lo que sucedió el día anterior o unas horas antes se habla de un episodio de amnesia, que es una pérdida de memoria inmediata y suele ser un hecho transitorio y temporal.
Un ejemplo frecuente es la amnesia que se da en los casos de accidentes de tráfico.