Los resfríos y la gripe son enfermedades muy importantes y que siempre provocan muchísimas molestias. Por suerte existen fármacos que nos ayudan a terminar con estos inconvenientes. Pero si no quieren utilizar medicamentos derivados de químicos pueden aprovechar las propiedades de muchos alimentos.
Es sabido que cuando hay cuadros de tos, catarro y mucosidad excesiva es necesario beber abundantes infusiones calientes y sopas. Pero esto no es todo. También hay que elevar la ingesta de vitamina C, la cual se encuentra primordialmente en los cítricos. Los limones y las naranjas son los más recomendados.
Pero además hay que cubrir la ingesta diaria de betacaroteno (espinacas, perejil, zanahorias), magnesio (pescados, legumbres, frutos secos), zinc (hígado, cereales, lácteos, pescados, huevos, etc.) y selenio (lácteos, cereales integrales, carne, etc.). Por último, no se olviden de que lo mejor para los resfriados es beber mucho líquido, lo que les ayudará a eliminar impurezas y combatir la deshidratación.
Granadas: Nos aporta grandes antioxidantes y mayor ácido fólico que el te verde, casi tres veces más. Dispone además de mucha vitamina C y es esencial para tratar dolores de garganta e infecciones de oído. Puedes tomar granadas tanto en jugo como en ensaladas o de forma natural.
Yogurt griego: “El yogurt que contiene cultivos vivos promueve un sistema inmune fuerte debido a las bacterias ‘buenas’ que impiden que las ‘malas’ aumenten”
El Atún: El atún es una fuente rica de selenio, lo que ayuda a proteger las células del daño de los radicales libres y fortalece el sistema inmunológico.
Los huevos: La proteína es esencial para construir masa muscular y mantener tu cuerpo fuerte. Los huevos también son ricos en vitaminas y minerales, incluyendo B6 y B12 que contribuyen a tener un sistema inmunológico saludable.
Naranjas y limón: ricos en vitamina C, ellos quienes refuerzan nuestras defensas y quienes alivian muchos de nuestros síntomas de gripes y resfriados. Sería muy necesario que desayunaras cada día un vaso natural de jugo de naranja,
Las verduras: los pimientos y las verduras de hoja oscura como las espinacas, las coles de Bruselas, el brócoli y la lechuga romana tienen mayor contenido de esta vitamina. Aunque la vitamina C no previene en sí de la gripe, sí ayuda a reducir el tiempo de enfermedad.
Ajos crudos: Consumir ajo crudo permite aprovechar al 100% todas las propiedades que tiene este poderoso alimento. El ajo es un antibiótico natural, que no sólo ayuda a prevenir, sino que también ayuda a curar. Este alimento ayuda a incrementar las defensas del organismo, ayudando a mejorar la respuesta ante el ataque de virus y bacterias. Es recomendado para combatir infecciones respiratorias y tratar la tos; también es ideal para expulsar más fácil los mocos que se producen con la gripa o los catarros.
Sopa de pollo: La carne de ave contiene cisteína, un aminoácido que reduce la mucosidad que se produce en los pulmones y en las fosas nasales. Un buen caldo caliente también alivia la deshidratación causada por el aumento de la temperatura corporal así como la irritación de la garganta.
Miel de abeja : se trata de un antibiótico natural muy potente, por lo que te ayudará especialmente a combatir la tos y eliminar la mucosidad.