El 70% de nuestro cuerpo se encuentra compuesto de agua, esto hace que sea importante beberla cada día, prefiriendo aquella que está libre de impurezas y tóxicos. El agua potable está expuesta a muchos contaminantes y la forma en que la podemos desintoxicar puede dañarnos esto si se utiliza cloro para hacerlo, por eso es importante contar con un filtro que ayude a purificar el agua lo que además entrega múltiples beneficios a la salud.
Entre los beneficios de esto se destaca la posibilidad de eliminar bacterias, virus y parásitos sin necesidad de utilizar cloro, ya que la cloramina junto al cloro puede provocar cáncer de vejiga y de colon, además de afectar la salud hepática. Otros de los beneficios es que elimina el fluoruro, componente que provoca enfermedades a las encías, cáncer de vejiga y disfunción en la tiroides por mencionar solo algunas.
Purificar el agua a través de métodos caseros
Se puede purificar el agua de forma simple en casa y con métodos caseros los que librarán de toxinas y bacterias este líquido tan importante para el cuerpo y para la salud. A través del calor se puede limpiar el agua y para esto solo es necesario hervir durante 5 minutos, esto ayudará a eliminar todos los organismos que pueden afectar la salud y provocar enfermedades; pero antes de beberla debe estar fría para evitar posibles quemaduras al contacto con el agua.
A través de la desinfección solar también se puede purificar el agua, también conocido como método SODIS, donde gracias a la radiación ultravioleta se puede desinfectar el agua. Esta es una técnica simple y económica que requiere de pocos pasos, solo se debe colocar el agua en botellas limpias de plástico transparentes, se tapan y se agitan con fuerza durante 20 segundos para que el agua tenga suficiente aire; esto reaccionará con la luz del sol durante el proceso de purificación del agua.
Se colocan las botellas en posición horizontal y donde reciba la luz directa del sol, dejándolas en ese lugar por un par de horas, siendo un método que se utiliza mucho cuando no se tiene acceso al agua potable.
Otra opción para purificar el agua es a través de un filtro casero, el que es muy efectivo cuando no se tiene acceso a agua potable por diversos problemas. Preparar este filtro casero es muy simple necesitando gravilla, arena, algodón, una botella plástica y un tubo de plástico blando, donde el primer paso es crear un orificio pequeño en la botella, lo que se puede hacer con un clavo caliente; luego se agrega el tubo en este orificio revisando que quede bien firme.
Se coloca el algodón en el fondo de la botella y se rellena con unos 10 centímetros de arena, agregando otros 15 centímetros de gravilla, esto siempre dependerá del tamaño de la botella. Se agrega agua sucia y una vez que se limpie se debe hervir antes de beber, ya que este es un filtro que no actúa como un anti microorganismos.
Beneficios de purificar el agua y recomendaciones
Otros de los beneficios de purificar el agua es que se proporciona un mejor sabor, ya que se elimina el cloro y las bacterias. Además reduce el riesgo de padecer enfermedades gastrointestinales, donde el riesgo se ve reducido hasta en un 33%, ya que se eliminan bacterias como la giardia y cryptosporidium, las que se encuentran en el agua potable.
Beber agua es muy importante para cuidar la salud, ya que previene infecciones urinaria, ayuda a transportar nutrientes esenciales al cuerpo, mejora el rendimiento físico, acelera el metabolismo y previene el estreñimiento, regula la temperatura corporal y previene las gripes; sin olvidar que el agua también actúa como lubricante natural de la boca, ojos y nariz.
La importancia de purificar el agua se relaciona con los contaminantes que puede contener como arsénico, plomo, mercurio y cadmio, los que afectan nuestra percepción sensitiva, dañan el sistema nervioso central, afectan algunas habilidades motoras, causan fuertes dolores de cabeza, alteran la digestión y provocan cansancio crónico e irritabilidad. Como son muchas las alternativas económicas para limpiar y desinfectar el agua, se debe preferir esto para que el cuerpo disfrute de sus beneficios y se eviten enfermedades, mejorando así nuestra calidad de vida.