Se utilizan aceites esenciales en aromaterapia para mejorar la salud física y emocional, y existen innumerables aceites esenciales, y a diferencia de otras medicinas alternativas, los beneficios de la aromaterapia se obtienen inhalando el aroma.
Existe una intima relación entre el sentido del olfato y la aromaterapia, los olores que percibimos se transmiten a través de las células olfativas que se encuentran en la nariz, y luego de un complejo mecanismo llegan a nuestro cerebro como señales nerviosas.
La principal técnica que se utiliza en aromaterapia es mezclando los aceites esenciales con agua caliente, el vapor que se desprende es inhalado por el paciente y así se logra el efecto terapéutico.
Los aceites esenciales relajantes de por sí son el amaro, el benjuí, el sándalo, el naranjo, la lavanda, la manzanilla, el jazmín, el enebro, ciprés, nerolí o el pachuli. De todos ellos la lavanda, el sándalo y el pachuli son los más utilizados, pero no por ello los más eficaces. El ciprés o el enebro, por ejemplo, son muy efectivos si lo que buscas es relajación, y un baño con algunas gotitas de ellos servirá para aliviar tensiones de forma sustancial.
Si lo que buscas es ir un paso más allá de la relajación y deseas aceites esenciales sedantes, hay dos que son especialmente útiles para ello. El orégano y el cedro son aceites esenciales ideales para tener en cuenta antes de ir a dormir y tener un sueño profundo y relajado.
Finalmente hay aceites esenciales que sirven para acentuar la calidez de las habitaciones. El clavo, el orégano, la nuez moscada, el anís, amaro, alcanfor, comino, jengibre o la nuez moscada pueden aplicarse en habitaciones donde la calidez no esté presente y quieras desarrollar un ambiente en el que pensar, leer un libro o simplemente sentirte como en tu casa.
Aplícalos alternativamente según lo que busques, sea relajarte, descansar o sentir comodidad. Puedes aplicar los aceites en forma de incienso o en la ducha, o bien comprando hojas aromatizadas y colocándolas en lugares estratégicos del hogar. Una correcta combinación de Aromaterapia y Feng Shui puede dar excepcionales resultados.
Por ser tan concentrados, los aceites esenciales también requieren una serie de precauciones al utilizarlos. Si se siguen estas consideraciones de forma correcta, con responsabilidad y sentido común, el uso de la aromaterapia es completamente seguro.
- Nunca utilizar aceites esenciales puros sobre la piel sin diluir (existen algunas excepciones que deberá consultar a una persona experta).
- No usar aceites esenciales puros por vía interna.
- Si recibe tratamiento homeopático, consulte con su homeópata ya que algunos aceites esenciales están contraindicados.
- Para utilizar la aromaterapia en bebés lactantes y niños siga las instrucciones de un terapeuta en aromaterapia. No administrar aceites esenciales a niños menores de 18 meses. En niños entre 18 meses – 12 años las dosis aplicadas deberán ser de ¼ parte a ½ parte de las del adulto. Y evitar en todo caso las inhalaciones directas.
- Durante la gestación evitar el uso de aceites esenciales. La mayoría de aceites esenciales están contraindicados, en especial aquellos con acción emenagoga y oxitócica. Sólo son seguros algunos aceites esenciales muy diluidos. Consultar con su aromaterapeuta.
- Evitar el contacto de los aceites esenciales en los ojos y mucosas.
- Para evitar hipersensibilidad y/o alergias realizar una prueba cutánea. Consultar a una persona experta en aromaterapia.
- Otras precauciones: tener en cuenta las posibles contraindicaciones de un aceite esencial en concreto y la observación de cuales son fototóxicos. Precauciones especiales en casos de asma y epilepsia.