El café es una bebida que ha tenido muy mala prensa estos últimos años. Aunque millones de personas lo siguen bebiendo, obviamente por sus notables beneficios. En este artículo me propongo contarles sobre todos los aspectos a tener en cuenta en los cuales nos influye tomar café, y ayudar a evaluar si su ingesta es buena idea para una vida saludable.
La parte buena, los beneficios de tomar café están, sobretodo, en el desayuno. Es muy bueno para calentar el cuerpo, y ayudarnos a despertarnos mejor. También tiene una gran cantidad de anti-oxidantes, los cuales han demostrado ser beneficiosos en la lucha contra el cáncer y mejoran la salud en general. Por otro lado, estudios han demostrado que el café ayuda con la insulino-resistencia y la diabetes, ya que ayuda a depositar los carbohidratos que consumes en los músculos y no en los depósitos de grasa.
El café también ayuda a liberar adrenalina, lo cual de manera moderada es algo bueno, ya que te ayuda a estar más despierto y con mejores reflejos. Otro de los beneficios comprobados del café es en el área de la memoria, pues se ha demostrado que ayuda a personas con parkinson y demencia.
Sus beneficios
Te llena de energía. Los investigadores han encontrado que la cafeína estimula al sistema nervioso, facilitando la coordinación, mejorando tu estado de ánimo y tu motivación. También incrementa la energía, la resistencia y la rapidez, y disminuye el cansancio.
Ayuda a estar alerta y concentrarte. Estudios recientes han demostrado que incrementa la capacidad de estar en un máximo estado de alerta y concentración. Al aumentar la actividad mental posiblemente te quite el sueño, aunque a muchas personas les provoca somnolencia y sueños muy reales.
Reduce el dolor de cabeza. Tomar una taza de café puede disminuir o eliminar el dolor de cabeza, pues éste se debe a la tensión de los vasos sanguíneos del cerebro y el café puede dilatarlos, reduciendo la intensidad del dolor. También favorece el efecto analgésico de la aspirina.
Evita coágulos sanguíneos. Próximamente se usarán fórmulas de cafeína en la elaboración de medicamentos para evitar coágulos sanguíneos que causan ataques cardíacos y embolias cerebrales. Múltiples estudios han demostrado que el café no sube la presión arterial, ni afecta el ritmo cardíaco, ni provoca ataques cardíacos.
Reduce el riesgo de sufrir Parkinson. Un estudio reciente ha señalado al café como una sustancia protectora que puede reducir el riesgo de padecer el mal de Parkinson: si no tomas café tienes de 2 a 3 veces más probabilidades de desarrollar la enfermedad que quienes sí lo toman.
Mejora el asma y las alergias. La cafeína dilata los bronquios, combatiendo las crisis de asma y otras alergias. Incluso en la actualidad la cafeína es una de las principales sustancias de muchos medicamentos para problemas respiratorios.
Previene la formación de cálculos. Varios estudios han comprobado que tomar una taza diaria de café ayuda a prevenir la formación de cálculos renales y biliares. El café tiene un efecto diurético y mediante el incremento de la eliminación de orina se desechan minerales que podrían acumularse.
No aumenta el riesgo de osteoporosis. Investigaciones recientes han determinado que consumir café en dosis moderadas no incrementa el riesgo de sufrir osteoporosis. Si consumes la cantidad necesaria de calcio en tu alimentación, la cafeína no modificará el calcio en tus huesos.
No provoca úlcera. Las úlceras son causadas por la bacteria helicobacter pylori, mas no por tomar café. El exceso de café (más de cuatro tazas diarias) aumenta la producción de jugos gástricos y puede agravar cualquier lesión estomacal. Por lo tanto, al igual que otros alimentos irritantes, no se recomienda si padeces de problemas gastrointestinales.
Disminuye el riesgo de desarrollar cáncer. Hay estudios científicos que reportan que el café no tiene relación con el riesgo de contraer cáncer. Por el contrario, consumir más de dos tazas diarias de café previene varios tipos de cáncer como el de colon o de vejiga, pues el café contiene 300 sustancias benéficas y antioxidantes. Incluso el café podría ser base para nuevos medicamentos para combatir el cáncer.
No afecta al embarazo. En la actualidad se ha demostrado que el consumo diario de 2 tazas de café no afecta la reproducción ni genera ninguna consecuencia negativa en una mujer embarazada.
No afecta su consumo en la infancia. La cafeína no produce efectos negativos en las cantidades que puede consumir un niño. Hay estudios que demuestran que la cafeína no es tóxica en los niños normales. Sólo en los niños hiperactivos debe ser restringida, pues es un estimulante.
Previene las caries. Ayuda a prevenir la caries, pues evita el crecimiento de bacterias en la boca, siempre y cuando se tome sin azúcar ni leche.
Disminuye la depresión. La depresión es una enfermedad y como tal se debe tratar bajo la supervisión médica de un especialista. Sin embargo, estudios publicados por centros de investigación con reconocimiento mundial, descubrieron que el consumo moderado de café (cuatro tazas diarias) ayuda a sobrellevarla, pues es un estimulante natural que brinda energía.
Reduce el riesgo de desarrollar diabetes. Según recientes investigaciones, beber entre tres y cuatro tazas de café al día puede reducir hasta en un 30% el riesgo de desarrollar diabetes, ya que sus componentes disminuyen la concentración del azúcar en la sangre.
Riesgos y efectos indeseados
Ahora seguiremos con la parte mala del café: aunque esté lleno de anti-oxidantes, muchos investigadores dicen que cuando consumimos el café, estos anti-oxidantes ya han sido quemados en el proceso de tostarlo. Otra parte mala es que el café queda en el organismo entre 5 y 6 horas, por lo que si tomas café de noche, cuando quieras dormir, todavía tendrás parte de ese café en tu cuerpo, lo que puede debilitar la calidad de sueño. El café es muy ácido, y no es lo primero que deberíamos consumir, ya que nuestro estómago no está preparado aún para digerir alimentos ácidos en la mañana.
Sistema nervioso
El café también puede causar insomnio en algunas personas, mientras que paradójicamente ayuda a otras a tener un sueño más profundo. También puede causar ansiedad eirritabilidad, en personas con un consumo excesivo de café, e incluso retraimiento en otras formas. También puede producir jaquecas, temblores, agitación nerviosa ytaquicardias.14
Intolerancia
Algunas personas manifiestan síntomas de intolerancia al café, principalmente en forma de molestias gastrointestinales, como dispepsia, cólicos, diarrea, vómitos, náuseas,úlceras gástricas, alteraciones en la motilidad gastroesofágica15 16 y otras manifestaciones neurovegetativas como ansiedad.17 14
El café puede irritar la mucosa gástrica y producir hiperperistaltismo en pacientes sensibilizados o con colón sensible.
Colesterol
Un estudio ha demostrado que el cafestol, una sustancia que está presente en bebidas de café hervidas, aumenta considerablemente los niveles de colesterol, especialmente en mujeres. El café filtrado sólo contiene trazas de cafestol.[cita requerida] Se ha demostrado que el cafe eventualmente, ayudaría a elevar el colesterol
Embarazo y menopausia
También tiene efectos género-específicos, en algunas afectadas con síndrome premenstrual aumenta los síntomas, y puede reducir la fertilidad en mujeres. También puede aumentar el riesgo de osteoporosis en mujeres postmenopáusaicas, y puede haber riesgos para el feto si una mujer embarazada bebe 8 ó más tazas al día (1,4 litros o más).[cita requerida]
Un estudio danés de febrero de 2003 con 18.478 mujeres relacionó el alto consumo de café durante el embarazo con un aumento significativo en el riesgo de abortos (pero no aumentó de forma significante el riesgo de muerte infantil en el primer año). «Los resultados parecen indicar un efecto umbral alrededor de cuatro a siete tazas por día,» informó el estudio. Aquellas embarazadas que bebían ocho o más tazas al día (1,4 L) tenían un riesgo un 220% mayor que el de aquellas que no tomaban café. Este estudio no se ha vuelto a repetir, pero ha hecho que algunos doctores tomen precauciones ante el consumo excesivo de café durante el embarazo.[cita requerida]
El café descafeinado es visto en ocasiones como un riesgo potencial para la salud de las mujeres embarazadas, debido a la alta incidencia de los solventes químicos usados para extraer la cafeína. Sin embargo, estas preocupaciones no tienen casi ninguna base, pues los solventes en cuestión se evaporan a 80-90 °C, y los granos de café están ya descafeinados antes de proceder a su tostado, que tiene lugar a unos 200 °C. Así, estos productos químicos, llamados cloruro tricloroetano y diclorometano, están presentes en cantidades muy bajas, y ninguno de los dos supone una amenaza significativa para los fetos. Las mujeres que aun así estén preocupadas por los solventes químicos del café descafeinado deben optar por los granos que utilizan el proceso del agua suiza, donde no se utiliza ningún producto químico a excepción del agua, aunque permanecen en el café cantidades más altas de cafeína
Los síntomas típicos del síndrome de abstinencia son:
- Dolor de cabeza de diferentes grados
- Fatiga, adormecimiento
- Dificultad para concentrarse
- Dificultad para trabajar
- Irritabilidad
- Depresión
- Ansiedad
- Síntomas de resfriado, como pueden ser: nauseas y vómitos, dolor o rigidez muscular, calor y frío…
- Deterioro psicomotriz, de la alerta y del rendimiento cognitivo