La espirulina es un organismo unicelular que frecuentemente se utiliza como suplemento dietético, dada la enorme cantidad de beneficios que trae. Estos beneficios ya son conocidos por el hombre desde hace milenios. Hay evidencias de que los aztecas la utilizaban sacándolas directamente del lago de Texcoco.
¿Qué es la espiruliuna?
La espirulina suele crecer profusamente en los lagos y lagunas volcánicas, en aguas de pH alcalino y con un alto contenido de sales. Si bien se suele afirmar que la espirulina es un alga, esto es incorrecto. Se trata de un organismo procariota que más bien pertenece al reino de las bacterias.
Su hábitat natural se encuentra en África y América del Sur, especialmente en cuencas volcánicas, donde puede vivir una vida tranquila y sin depredadores.
La espirulina como suplemento nutricional
La espirulina tiene una enorme cantidad de sustancias beneficiosas para el organismo. Tiene tanto proteínas como hidratos de carbono y ácidos grasos. Además de estas macromoléculas tan vitales, contiene microelementos que son igual de necesarios para el organismo. Contiene magnesio, calcio, hierro, manganeso, zinc, fósforo, entre otros. Asimismo, contiene gran variedad de vitaminas: especialmente vitaminas C y D y algunas del grupo A (betacaroteno) y B (como la B12, el ácido fólico, etc.)
Es una fuente no animal de proteínas, por lo cual las personas vegetarianas o veganas pueden utilizarla como principal suplemento proteico natural.
Espirulina como medicina natural
No solamente se utiliza como suplemento dietario, sino que también se le ha dado un uso terapéutico. Se han reconocido resultados en el tratamiento de la artritis, la obesidad, diabetes, anemia, ciertos tipos de tumores e incluso enfermedades neuropsiquiátricas, como trastornos del sueño. Y también tiene propiedades antivirales, antibacterianas y antioxidantes. ¿Qué más se le puede pedir?
Hoy por hoy la espirulina se comercializa de manera industrial (en forma de polvo, cápsulas, pastillas, etc.) y es muy fácil de conseguir. Pese a que sus enormes propiedades beneficiosas se conocen desde tiempos inmemoriales, recién en la segunda mitad del siglo XX es que comenzó a cultivarse para su comercialización.
Los beneficios de la espirulina son inmensos. Tanto para usarla con un fin en especial (como por ejemplo perder peso) o simplemente como suplemento en la dieta diaria, el incorporarla a nuestra vida es sin duda alguna un acierto. Sólo basta ver que se hacen mascarillas purificantes caseras y hasta bombones adelgazantes para comprenderlo.
En verdad, la naturaleza es muy generosa.