Todos los alimentos aportan diferentes beneficios a nuestro cuerpo, por eso es bueno conocer qué es lo que cada uno nos da. De esta forma, podemos modificar nuestra alimentación en relación a lo que nuestro cuerpo necesita. Hoy vamos a hablar en especial del pan de centeno y de todo lo que este nos aporta. ¡Presta mucha atención!
Este pan, conocido también como pan negro o Pumpernickely, es de color oscuro y muy compacto, de seguro todos en algún momento lo probamos o al menos lo conocemos. El mismo tiene fama de ser más sano que el pan blanco, lo cierto es que ambos tienen distintas propiedades.
El pan de centeno es adecuado para cuando se sufre de estreñimiento, diabetes y colesterol alto. Una de las principales diferencias con el blanco es que la harina de centeno tiene menos cantidad de gluten, que el resto de harinas, es por ello que responde peor a la acción de la levadura y la masa no capta tanto gas al fermentar. Debido a esto, tenemos como resultado un pan más compacto que el de trigo y menos esponjoso, algo más oscuro y más amargo.
Por otro lado, el pan de centeno tiene mayor cantidad de proteínas y grasas, y además, contiene más hidratos de carbono y más fibra, lo que le aporta muchos beneficios. Debido a la gran cantidad de fibra que aporta constituye un buen laxante, por esta razón es muy recomendado cuando se sufre de estreñimiento. Además, está indicado a aquellas personas que tienen diabéticos y para quienes tienen niveles altos de colesterol en sangre.
Sin duda nos beneficiaremos mucho si elegimos incluir este alimento a nuestra dieta diaria. Una recomendación es utilizarlo como acompañamiento en recetas como: canapés de salmón y medallones de queso de cabra, paté de champiñón, paté de garbanzo o queso fresco entre otros.
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