Consejos para adelgazar en verano

Consejos para adelgazar en verano. Las dietas de descenso rápido por lo general se basan en eliminar líquidos del organismo, en vez de eliminar la grasa; eso nos hace adelgazar, pero se vuelve a recuperar el peso que se tenía antes de la dieta.

Lo primero que debemos evaluar es como esta nuestro índice de masa corporal (IMC), la tabla más usada es el índice Quetelet, que se obtiene de dividir el peso entre la altura al cuadrado.

La fórmula : IMC= Peso (kg)/ Altura (m)2

Resultados:

IMC = 20-25: rango aceptable

IMC = 25-28: sobrepeso leve

IMC = 28-32: sobrepeso moderado

IMC = 32-40: obesidad grave

IMC = + 40: obesidad mórbida

El sobrepeso leve o moderado es fácil de adelgazar ajustando la alimentación con estos consejos estaremos en el camino correcto:

Ejercicio físico: una de las cosas más importante; cualquier ejercicio es bueno, nos ayuda a quemar calorías y modelar el cuerpo.
Consumir alimentos light, para reducir calorías consumidas a la mitad.
No pesarse seguido, lo ideal es cada 15 días o un mes.
Ingerir 1,5 lt y 2 litros de agua o infusiones
Abandonar las gaseosas, refrescos azucarados, batidos de chocolate, café instantáneo, etc.
Aumentar los lácteos, si son descremados mejor; evitar quesos grasos.
Tomar zumos de frutas naturales, o consumir fruta fresca.
Comer 1 o 2 veces a la semana pastas y legumbres.
Ingerir 3 veces a la semana pescado y otras 3 de carne.
Aumentar la cocinar al vapor o al horno y no saltearse las 4 comidas diarias.

Los alimentos más apropiados que debes tener en cuenta para perder peso en veranoson los que se encuentran dentro del grupo de las frutas y verduras. Las razones son muchas para enumerar.
- Contienen un alto porcentaje de agua que no sólo te brindará saciedad, sino también te ayudará a hidratarte.
- La fibra que aportan te permite desintoxicar el organismo, ya que aumenta la motilidad intestinal. Aunque es necesario que, no olvides beber agua para reponer el líquido perdido.
- En general estos alimentos tienen un muy buen aporte de potasio, que aumenta la eliminación de líquidos, especialmente si sufres de retención de líquidos. En este caso también debes ser cuidadosa y evitar la deshidratación.
- Asimismo, se podría decir que las frutas y verduras son alimentos antioxidantes, que mejoran la actividad celular, la combustión de las grasas y evitan la acción nociva de los radicales libres.
Otro de los alimentos apropiados para comer en el verano es el pescado, esta carne aporta poco contenido graso y proteínas de buena calidad que brindan saciedad. Dentro de esta carne, puedes encontrar el atún que es muy práctico para incorporar a comidas frías.
Por otro lado, no deben faltar los lácteos desnatados que puedes aprovechar para consumirlos de diferentes formas y en distintas preparaciones. Tanto la leche como el yogur, o el queso bajo en grasas tiene un alto contenido en proteínas y de calcio que ayudan a intensificar la saciedad. Por otro lado, son alimentos, con los cuales puedes preparar variadas preparaciones, como por ejemplo licuados, helados, salsas frías o incorporarlos a las ensaladas (como es el caso del queso y el yogur).

No pasar hambre: igual que en el caso anterior, es aconsejable evitar las dietas muy restrictivas, que además tienen un índice fracaso muy elevado.

Las verduras bajas en carbohidratos poseen muchos nutrientes. Una dieta basada en fuentes de proteínas magras y vegetales contiene toda la fibra, vitaminas y minerales que se necesita para estar saludable.

La ensalada es otra forma de disfrutar de las legumbres en verano, prueba a cocer alubias, garbanzos, soja o lentejas y añadirlas frías a la ensalada para y disfrutar de su riqueza en fibra, proteína vegetal e hidratos de carbono, sin pasar calores.

Si eres de los que necesitas además mantener a raya la ansiedad por comer de manera compulsiva, tu fruta es el plátano porque mantiene el potasio “up” y su efecto saciante evita que caigas en tentaciones poco saludables.

En el desayuno, prepara batidos de fruta con yogur y guárdalos en la nevera para tenerlos listos cuando te levantas, este es un secreto que nos ayuda a perder peso rápido, que es tener siempre la comida ya preparada, de esta manera reducimos el ansia

Divide las raciones de comida por la mitad y guarda una parte para más tarde. Es probable que te sientas lleno con menos comida de la que crees y luego, si te entra hambre a media tarde (o media mañana), tendrás un tentempié saludable.

El último truco que apenas nos costará trabajo llevar a cabo es comer en platos más pequeños