Adelgazar en verano,trucos para adelgazar. Muchas de las personas que padecen sobrepeso es a causa de una mala alimentación y del sedentarismo; para adelgazar de forma sana y adecuada, hay que olvidar las dieta rápidas que prometan bajar mucho peso en poco tiempo.
Una alimentación sana y equilibrada. Esto es fundamental no solo para perder peso, sino para gozar de una buena salud. Por ello, una dieta equilibrada que contenga frutas, verduras frescas, pescados, carnes blancas, hortalizas, legumbres y cereales, todo ello con moderación, será perfecto para desempeñar esta primera parte.
El verano es la mejor temporada de muchas frutas como sandías, melones, albaricoques, melocotones, ciruelas, peras, cerezas, nísperos, etc. Son alimentos bajos en calorías, ricos en hidratos de carbono de índice glucémico medio y te aportan agua, vitaminas, minerales y fitoquímicos, las sustancias medicinales de moda que te ayudan a prevenir y curar enfermedades.
Estas dietas no resultan efectivas, ya que al terminarlas se gana el peso perdido y algo más, porque lo que se ha perdido no era otra cosa que agua y lo que interesa perder es grasa, además de no ser equilibradas en los nutrientes más importantes, por ello, la incapacidad de poder realizarlas, más allá de una semana.
Para conseguir adelgazar saludablemente, se necesita más tiempo, pero será necesario realizar cambios en los hábitos diarios, optar por una alimentación libre de grasas, de alimentos procesados, fritos y comida chatarra, así como alimentos saludables como las frutas y vegetales e incluir cereales integrales en la dieta, y eliminar todos aquellos refinados. Evitar la sal, ya que hará que retengas líquidos y realizar alguna actividad física al menos tres o cuatro días por semana, que sí ayudarán a eliminar peso más rápida y eficazmente.
Una vez el cuerpo está habituado a comer bien y sano, el segundo paso es empezar a realizar ejercicio físico. Debemos escoger algo que nos guste, que nos motive y que podamos practicar de forma regular. Lo ideal es realizar deporte al menos tres veces por semana durante un mínimo de 30 minutos.
Tomar abundante cantidad de agua, el aporte hídrico debe ser de 2 litros diarios, no se incluyen las infusiones. Esto ayudará a expulsar las toxinas de los riñones.
Cuidar el consumo de alcohol, grasas animales, proteínas animales, azúcares, harinas refinadas, alimentos procesados y lácteos.
Limitar el consumo de sal, así como los alimentos ricos en ella, como embutidos, conservas, ahumados o sopas preparadas.
El verano es propicio para ello, por que se comen más cantidad y variedad de alimentos frescos como los vegetales y las frutas, es tiempo y ocasión para beber más agua, que aporta grandes beneficios, como la hidratación del organismo y la piel, la eliminación de tóxicos y ayudrá a movilizar las grasas; si sigues estos consejos, irás perdiendo peso paulatina y adecuadamente.
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