Las uvas, tan jugosas y deliciosas, crecen en racimos y pueden ser encontradas en diferentes colores tales como el púrpura, el carmesí, negra, azul marino, uvas amarillas, verdes, naranja y hasta rosa. Estas pueden ser comidas crudas o por medio de la fabricación de vino, vinagre, de mermelada, por medio de jugos naturales, jaleas, hay extractos de semilla de uva, pasas de uva y aceite de semilla de uva. Las uvas destacan por estar disponibles durante todo el año.
Además de ser sabrosas, las uvas cuentan con numerosos beneficios para nuestra salud, desde ayudar a prevenir el cáncer, hasta ser utilizadas para tratar el estreñimiento y la mala vista.
Las uvas cuentan con fibra, múltiples proteínas, cobre, potasio, con hierro, ácido fólico y cuenta además con vitaminas A, K, C y B2. Las uvas también son ricas en propiedades antioxidantes, tiene propiedades antiinflamatorias y antimicrobianas así como fitonutrientes, cuenta con fenoles y polifenoles. Las uvas también cuentan con un alto contenido de agua y son buenas para nuestra hidratación.
Beneficios de la uva
Nos protege contra el cáncer; Uno de los grandes beneficios de la uva, es que cuentan con propiedades antioxidantes y antiinflamatorias con las que cuenta las uvas, estas nos ayudan a proteger nuestro cuerpo contra el cáncer. Las uvas también previenen el estrés oxidativo crónico y la inflamación crónica, lo que son dos factores importantes que pueden causar el cáncer. Además de reducir el riesgo de sufrir de cáncer, las uvas también llegan a suprimir el crecimiento y la propagación de las células cancerosas.
Las uvas son especialmente eficaces para poder reducir el riesgo de cáncer colorrectal, el que afecta a nuestro pulmón, cáncer de próstata e incluso el cáncer de mama. El compuesto resveratrol es un potente antioxidante que nos ayuda a proteger la piel contra los rayos UV que son perjudiciales, reduciendo así el riesgo de sufrir de cáncer de piel. Para poder reducir el riesgo de desarrollar cáncer, solo bastara con disfrutar de un puñado de uvas frescas o jugo natural desarrollado con este producto.
Reduce el colesterol perjudicial; Los flavonoides y antioxidantes que se encuentran en las uvas, nos ayudan a mejorar nuestros niveles de colesterol. De hecho, esta fruta nos puede ayudar a disminuir los niveles de lipoproteína de baja densidad conocido también como el colesterol malo, aumentando los niveles de lipoproteínas de alta densidad conocido también como el colesterol bueno.
Por otra parte, las uvas también logran aumentan los niveles de óxido nítrico en nuestra sangre, lo cual previene los coágulos sanguíneos y reduce el riesgo de sufrir ataques cardíacos.
Aumenta nuestra capacidad cerebral; Las uvas también son buenas para nuestra salud cognitiva. El comer de manera regular uvas nos puede ayudar a mejorar el poder de nuestra memoria y nos ayuda prevenir el deterioro de la memoria relacionada con la edad. El resveratrol que se encuentra en las uvas aumenta el flujo sanguíneo en cerebro y mejora las respuestas mentales. Las uvas incluso pueden retrasar la aparición de enfermedades degenerativas neuronales como la demencia.
Además, otro de los beneficios de la uva es que logran evitar bacterias que dañan el cerebro y radicales libres, los cuales pueden causar la enfermedad del Alzheimer. Según un estudio que se realizó en el 2009, el jugo de uva logra mejorar la memoria en adultos mayores con deterioro cognitivo en un nivel leve.
Logra combatir la fatiga; Las uvas son consideradas una merienda ideal para combatir la fatiga y mejorar nuestros niveles de energía. Las uvas están cargadas de vitaminas de alta calidad, así como el magnesio, fósforo, hierro y de cobre. Todos estos nutrientes trabajan juntos para impulsar nuestro sistema inmunológico, proporcionan energía y ayuda a combatir los síntomas que provocan fatiga.
Además, al comer uvas de manera regular puede mantener nuestros niveles de hierro y minerales equilibrados. Además, el contenido de carbohidratos en la uva nos ayuda a mantener que los sistemas nerviosos y musculares funcionen de manera correcta.
El comer sólo un puñado de uvas o medio vaso de jugo de uvas nos puede dar energía instantánea y hacernos sentir menos fatigado. Sin embargo, las uvas oscuras no pueden proporcionar este impulso de hierro que es necesario para luchar contra la fatiga. Por ende, debemos recurrir a las uvas de colores claros, ya que estas son las mejores para combatir la fatiga.