Hoy vamos a dedicar un espacio a una fruta típica del otoño, la uva, ¿ya has comenzado a consumirlas? Si no es así entonces te recomendamos comenzar a hacerlo, ya que es una fruta con múltiples propiedades. Hoy te contamos algunas de las principales, para que veas su importancia para la salud. ¡Esperamos te sea muy útil!
Las uvas son una excelente opción para meriendas y postres para todas las edades, son fáciles de consumir y muy prácticas. Una de sus principales propiedades es que es un fuerte antioxidante, esto quiere decir que nos ayuda a combatir los radicales libres, causantes de enfermedades como al gripe. En notas anteriores ya hemos hablado sobre este aspecto.
Por otro lado, es una fruta hidratante, protectora y energética, perfecta para aquellas personas que quieren tener una piel tersa y cuidada. Hay inclusive muchos tratamientos en donde se utilizan las uvas para hidratar y nutrir la piel.
Debemos destacar su contenido nutricional, las uvas son ricas en vitaminas B3, minerales y oligoelementos, tales como el calcio, el magnesio, el fósforo y el potasio. Por esta razón también nos permiten cuidar del sistema inmunológico y prevenir la formación de coágulos en la sangre.
La uva, por su contenido en fibra es un laxante suave. En caso de estreñimiento, se recomienda consumir las uvas sin pelar y con pepitas, ya que es ahí donde se encuentran las sustancias que favorecen la motilidad intestinal y ayudan a regular su funcionamiento. Para quienes sufren de estómago delicado, lo más conveniente es consumir el zumo de la uva o mosto. Por la riqueza en azúcares de las uvas, las personas con diabetes y exceso de peso pueden tomarlas pero controlando la cantidad.
El contenido moderado de ácido fólico o folatos, vitamina imprescindible en los procesos de división y multiplicación celular que tienen lugar en los primeros meses de gestación, hace que el consumo de uvas resulte interesante para las mujeres embarazadas para prevenir la espina bífida, alteración en el desarrollo del sistema nervioso (tubo neural) del feto.
Debido a su particular composición, estas frutas poseen un efecto diurético beneficioso en caso de hiperuricemia o gota y litiasis renal (favorece la eliminación de ácido úrico y sus sales), hipertensión arterial u otras enfermedades asociadas a retención de líquidos.
El ácido oxálico que contienen las uvas negras puede formar sales con ciertos minerales como el calcio y formar oxalato cálcico, por lo que su consumo se ha de tener en cuenta si se padecen este tipo de cálculos renales, ya que se podría agravar la situación.
Los polifenoles y los taninos, sustancias abundantes en las variedades rojas pueden desencadenar migraña en personas propensas.
- Una de las propiedades de la uva es un compuesto fitoquímico polifenólico llamado resveratrol.
- Otro compuesto polifenólico antioxidante en la uva son las antocianinas, principalmente abundante en las uvas rojas.
- Las uvas tienen un contenido calórico muy bajo, 100 g de uvas frescas aportan tan sólo 69 calorías y nada de colesterol.
- Entre los minerales de la uva se encuentra el cobre, el hierro y el manganeso.
- La uva contiene vitamina C en altas cantidades, también posee vitamina A, vitamina K, algunas vitaminas del complejo B y carotenos.
- Entre los beneficios de la uva se puede citar el control de la migraña, del colesterol, de algunas enfermedades del corazón y algunas propiedades de la uva también son anticancerígenas.
El resveratrol de la uva, la juventud y la salud del corazón
El resveratrol es un compuesto presente en todas las partes del fruto de la uva. Algunas investigaciones recientes indican que este compuesto químico tiene la capacidad de incrementar la expresión de tres genes en el cuerpo humano que están relacionados con la longevidad. Por lo que se supone que la uva puede ayudar a desacelerar el proceso de envejecimiento.
Por último, destacamos que reducen el riesgo cardiovascular y la hipertensión arterial, así como la formación de cataratas, protegiendo la visión, y ayudando a prevenir la inflamación. Sin duda una fruta con muchas propiedades, ¿no crees?