Muchos sentimos en algún momento de nuestra vida terribles dolores de espalda, molestias relacionadas con esta parte del cuerpo que a veces maltratamos sin darnos cuenta. Es posible que la falta de ejercicio y los malos hábitos relacionados a la postura puedan causarnos dolor de espalda. En el siguiente post te daremos algunos consejos para mitigar y aliviar este sufrimiento. ¡Sigue leyendo!
Es frecuente el dolor lumbar, la artrosis o la osteoporosis
Sufrir de dolor lumbar tiene mucho que ver con las posturas que adquirimos a lo largo del día, y también que se mantienen a lo largo de los años. Aquellas personas que se pasan el día sentadas o de pie tienden a sufrir más. Esto es debido a que las dos posturas mantienen en tensión a los músculos.
Pero ¿Por qué aparecen los dolores de espalda? Pueden ser causa de sobrecarga traumática, consecuencia del levantamiento excesivo de cargas pesadas, malas posturas (por cuestiones de trabajo y/o estudio). Todo esto tenderá a causarnos molestias y muchos dolores.
1. Fundamental acudir al médico
En caso de mucho dolor tenemos que ir al médico, el que nos recetará los medicamentos adecuados para reducir la inflamación, aliviar las molestias y los dolores.
2. Un buen masaje
Puede ser de gran utilidad darnos un buen masaje, que nos ayudará a relajarnos y destensar la espalda. Para ello acudir a un profesional.
3. Ejercicios de estiramientos
Nos acostaremos boca arriba, elevaremos las rodillas hacia nuestro pecho y mantendremos esta posición al menos durante 15 o 20 segundos, para después volver a la posición original. Repetiremos este movimiento varias veces, hasta que la tensión remita.
4. Respiraciones profundas
La respiración profunda que practicamos durante la relajación y/o meditación nos auida a aportar alivio a nuestra espalda, y destensarla. Aumentaremos así las mejoras y el aporte de oxigeno a todos nuestros musculos.
5. Ten un buen colchón
Y también una almohada adecuada, pues de lo contrario, padeceremos mucho más de dolores de espalda. El colchón deberá ser firme y la almohada baja. Es muy importante dormir bien.
6. Ten en cuenta las posturas
La cuestión es re-educar tu postura. Debemos sentarnos correctamente si vemos la televisión o en el estudio, tenemos que usar una almohada de lumbares, es útil para colocarla en la curva natural de tu espalda. También es probable que nos sentamos incorrectamente frente al ordenador, que levantemos objetos del suelo haciendo presión en la espalda, que tengamos alguna silla incómoda en el trabajo, llevemos tacones altos o no descansemos lo suficiente. Deberías evitar este tipo de hábitos.
7. Haz ejercicio
Esto te ayudará a fortalecer tus músculos, sobretodo los abdominales. Esta es una de las mejores prevenciones para que los dolores de espaldas no aparezcan. Recomendamos deportes como la natación, los pilates, el yoga o el Tai Chi. Podemos observar que la meditación y la relajación nos ayudarán.
8. Giros de cadera
De pie, o con los pies separados, contrae los músculos abdominales y tendrás que colocar la palma de tus manos sobre la cadera. Imagina que tienes en tu cintura un arco de hula-hop, tendrás que girar las caderas de derecha a izquierda. 5 veces mínimo.
9. Realiza estiramientos con el cuello:
Esta clase de ejercicios nos ayudarán mucho. Deben hacerse cada día, de manera suave y lenta, de arriba a abajo, de lado a lado; de oreja a oreja… Es importante hacerlas después de cualquier ejercicio físico.
10. Evitar el reposo total.
Si sufres este tipo de dolores debes hacer vida normal, ni coger pesos ni realizar movimientos bruscos. Pero es recomendable realizar ejercicio de forma moderada. La permanencia en la cama está recomendada únicamente al principio, si el dolor es intenso. Igualmente, debemos cambiar de postura cada dos horas.
11. Debes aplicar calor
El origen del dolor suele ser de origen muscular , así que la terapia térmica ayuda a relajar esta zona. Se puede aplicar en sesiones de unos quince o veinte minutos, pudiendo hacerlo con una manta eléctrica o bolsas de agua caliente. Los masajes o la aplicación de ultrasonidos también pueden resultar de gran ayuda para aliviarnos esa clase de dolor. Prueba a ello.
12. Caminar con la espalda recta
En muchos casos y muchas personas, suele caminar con la espalda encorvada, cargando el peso de los hombros hacia delante. Lo importante es que no hay que abusar de los zapatos de tacones altos ni de los bolsos muy pesados.
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