Las picaduras de mosquitos, pulgas, hormigas, chinches, y otros insectos suelen producir lesiones de diferentes tamaños que ocasionan picazón y enrojecimiento. Las pulgas y chinches se introducen debajo de las ropas para picar.
Cuando las abejas, avispas y abejorros pican, producen inflamación acompañada de enrojecimiento y dolor, lo cual puede prolongarse durante varias horas. Las abejas al picar dejan el aguijón clavado y mueren.
Las avispas conservan el aguijón pudiendo volver a picar varias veces. Además liberan una sustancia (feromona) que puede atraer a otras avispas de la colonia.
Las garrapatas, grandes ácaros (parientes de las arañas), generalmente presentes en perros o en las hierbas secas, se adhieren a la piel y succionan sangre durante varios días, no ocasionan picazón ni dolor, y a veces son difíciles de reconocer.
En la mayoría de los casos, las mordeduras y picaduras de insectos se pueden tratar en casa fácilmente. Sin embargo, algunas personas tienen una reacción alérgica grave a dichas mordeduras y picaduras. Esta es una reacción alérgica potencialmente mortal conocida como anafilaxia y requiere atención médica urgente. Las reacciones severas pueden afectar al cuerpo entero y pueden ocurrir muy rápidamente, a menudo en cuestión de unos pocos minutos. Sin tratamiento, estas reacciones severas pueden convertirse en mortales rápidamente. Llame al número local de emergencias (911 en los Estados Unidos) si usted se encuentra con alguien que presente dolor torácico, hinchazón de cara o boca, dificultad para deglutir, dificultad para respirar o entra en shock.
Algunas picaduras de arañas, como la viuda negra o la reclusa parda, también son serias y pueden ser mortales. La mayoría de las picaduras de arañas, sin embargo, son inofensivas. Si lo pica un insecto o una araña, lleve el animal para su identificación si esto se puede hacer de manera rápida y segura.
Síntomas
Los síntomas que no implican una urgencia varían de acuerdo con el tipo de insecto y el individuo. La mayoría de las personas experimentan dolor localizado, enrojecimiento, hinchazón o picazón. También se puede experimentar una sensación de ardor, entumecimiento u hormigueo.
¿Sabes cómo actuar ante una picadura? Sigue estos consejos para tratarlas rápida y correctamente:
- La picazón que provocan las picaduras de mosquitos, pulgas, hormigas rojas y chinches se alivia aplicando compresas o loción de calamina en cualquier parte del cuerpo del niño, a excepción del área alrededor de los ojos y los genitales. Si la picazón o el dolor son muy severos, consulta con el pediatra antes de aplicar cremas, lociones u otros remedios caseros. Es posible que el pediatra le recete un antihistamínico oral (tomado).
- Si se trata de picaduras de abejas o avispas, empapa un paño en agua fría y presiónalo sobre el área afectada para reducir el dolor y la inflamación.
- Si la picadura es de abeja, el insecto muere, pero el aguijón se queda en la piel y es importante que lo extraigas enseguida y en su totalidad, raspándolo de forma horizontal con el borde de una tarjeta de crédito, por ejemplo, o con tus uñas, con mucho cuidado para no irritar más el área. No lo retires con pinzas, ya que puedes apretar la bolsa del veneno, y aumentar así la cantidad de éste que se libera en la piel. Las avispas al picar no dejan el aguijón, pero no mueren, y pueden picar de nuevo.
- Si se trata de una picadura de garrapata, extrae la cabeza con pinzas, sin torcerla ni moverla bruscamente. No uses vaselina ni enciendas fósforos para extraer la garrapata. Después limpia la zona con alcohol. Lava bien el área afectada con agua tibia y jabón varias veces al día hasta que la herida cicatrice.
- Cubre el área afectada con hielo envuelto en un paño. Déjalo 10 minutos, retíralo y repite.
- Para aliviar el dolor, dale al niño acetaminofen o ibuprofeno; para el dolor y la picazón, dale un antihistamínico de venta libre por vía oral. Pero siempre con la autorización del pediatra.
- Mantén las uñas del niño cortas y bien limpias para minimizar el riesgo de infección si se rasca. Mejor aún, trata de que no se rasque la zona afectada.
Cuando buscar ayuda médica.
Aunque por lo general las mordeduras y picaduras de los insectos se pueden tratar en casa, algunas personas tienen reacciones alérgicas, a veces tan serias que llegan a ser peligrosas y requieren atención médica de urgencia. Si tu hijo experimenta alguno de estos síntomas después de una picadura de insecto, busca ayuda médica inmediata:
- Dificultad repentina para respirar o respiración entrecortada o con silbidos.
- Opresión en el pecho o en la garganta.
- Debilidad o inconsciencia (pérdida del conocimiento).
- Urticaria o picazón en todo el cuerpo.
- Gran inflamación cerca de los ojos, los labios o el pene, que le provoca dificultad para ver, comer y orinar.
- Piel amoratada.
- Náuseas o vómitos.
Una picadura en cualquier lugar de la boca requiere atención inmediata, porque puede provocar hinchazón grave y puede obstruir las vías respiratorias. También si hay una erupción en la piel que se extiende, si es muy extensa en la zona de la picadura o si persiste por más de tres días, ya que pudieran ser síntomas de infección.
Muy importante: aprende a prevenir las picaduras.
Es imposible prevenir del todo las picaduras de los insectos, pero sí puedes minimizar los riesgos de que tu hijo las sufra, siguiendo estas reglas:
- Evita que los niños vayan a las áreas en las que se congregan los insectos, como los botes de basura, charcos de agua, alimentos y dulces destapados, huertos y jardines en floración.
- Si el niño va a ir a lugares en los que hay insectos, haz que se vista con pantalones y camisas de mangas largas, de preferencia de telas ligeras. Así estará más protegido.
- No lo vistas con ropa de colores brillantes o con estampados floreados, que tienden a atraer a los insectos.
- No les apliques perfumes, jabones o lacas para el cabello perfumados, ya que también atraen a los insectos.
- Evita que el niño provoque a los insectos, y que haga movimientos bruscos y rápidos cerca de las colmenas o los nidos de los insectos.
- Ten cuidado si van a comer en espacios abiertos, sobre todo si hay dulces o bebidas azucaradas. Siempre mantén los alimentos cubiertos.