Qué es el síndrome del colon irritable

Hoy queremos hablar sobre un problema muy común que muchas personas sufren, incluso algunas ni siquiera saben que lo tienen. Se trata del síndrome de colon irritable, te contamos sobre sus síntomas y tratamiento, de forma que puedas convivir con este problema sin que esto afecte la calidad de tu vida, ¡presta mucha atención!

Los síntomas de este trastorno son muy variados, para que este problema se identifique como tal los síntomas deben aparecer de manera continuada durante 12 semanas o más a lo largo del año.

Los síntomas de colon irritable son:

– Gases y flatulencias.
– Halitosis
– Sensación de hinchazón abdominal.
– Estreñimiento continuado que se alterna con momentos de diarrea.
– Retortijones que desaparecen cuando se va al baño.
– Necesidad de ir al baño tras levantarse, o bien cuando se acaba de comer.
– Calambres abdominales y malestar estomacal.
– Fatigas.

En cuanto a los tratamientos, no existe una formula para eliminar este problema, lo que debe hacerse es cambiar los hábitos nutricionales y modificar el estilo de vida. Es importante que la persona se esfuerce por vivir una vida tranquila y estable sin estrés, ya que esto tiene una gran influencia. En cuanto a la alimentación, se recomienda aumentar el consumo de alimentos ricos en fibra y de probióticos. Además, es importante evitar el café, alcohol y tabaco. También debes comer despacio y sin prisas, además de practicar deportes.

Es aconsejable modificar la dieta, evitar comidas copiosas, y consumir alimentos bajos en grasas y ricos en proteínas, así como evitar alimentos flatulentos. Para combatir el estreñimiento, se sugiere el consumo de fibra alimentaria (frutas, verduras, salvado de trigo, etcétera) y agua.

Recomendaciones generales aplicables a todo el mundo

Comer tres veces al día y no saltarse comidas.
No comer tarde por las noches y hacerlo en pequeñas cantidades.
Comer con tranquilidad. Una buena digestión necesita relajación.
Limitar la ingesta de alcohol a dos unidades al día y mantener al menos dos días libres de alcohol a la semana.
Reducir la ingesta de cafeína. No superar las dos tazas de café al día.
Reducir las bebidas con gas.
Beber al menos ocho vasos de líquidos al día, sobre todo agua o bebidas sin cafeína.
Reducir los alimentos con alto contenido en grasa, como las patatas de bolsa, la comida rápida, el queso, la pizza, las salsas cremosas y los snacks.
Reducir los alimentos manufacturados y cocinar con ingredientes frescos en la medida de lo posible.

Dieta pobre en grasas y rica en proteínas (carnes y pescados).
Evitar los alimentos que cada paciente nota que le desencadenan o empeoran sus síntomas. Los que con más frecuencia perjudican son: especias, alcohol, tónica, sopas de sobres, cacao, derivados lácteos, quesos, bollería, pasteles, helados, mantequilla…
Evitar las bebidas con gas y los alimentos flatulentos como garbanzos, lentejas, habas, col, coliflor, cebollas, puerros, guisantes, frutos secos y en conserva.
Evitar comidas copiosas, comer despacio y masticar bien.
Mantener un horario fijo de comidas, e intente evacuar siempre a la misma hora y sin prisas, preferiblemente después del desayuno.
Ejercicio físico adecuado a la edad (caminar, nadar) y evitar el sedentarismo.
El dolor abdominal se puede aliviar aplicando calor local suave.
Evitar el uso de laxantes.
Realizar ejercicio puede ayudar también a aliviar los síntomas del intestino irritable.

Los tratamientos para el síndrome del colon irritable varían de un paciente a otro, e incluyen cambios en la alimentación, la nutrición y el ejercicio. Algunos pacientes necesitan suavizantes de heces para tratar el estreñimiento; otros, medicamentos antidiarreicos.