Los principales motivos por los cuales el té blanco es bueno para perder peso, es que tiene capacidades para acelerar el metabolismo. Esto favorece a quemar calorías y lípidos de manera más ágil.
Entre los beneficios con los que contaría el té blanco para ayudar a la pérdida de peso se encuentran algunos de notable estima para las personas que están haciendo dietas.
Por ejemplo, el té blanco cuenta con un gran poder de acción sobre la zona digestiva, ayudando en los procesos y mejorando el tránsito intestinal, lo cual lo convierte en un buen eliminador de grasas y toxinas. También es suavemente diurético y, por ende, colabora con la expulsión de líquidos.
Si sufres de sobrepeso y quieres perder esos kilos de más, puedes incorporar té blanco a tu dieta baja en calorías o realizar la dieta del té blanco propiamente dicha y aprovechar todas sus propiedades para adelgazar. Este té, oriundo de China, posee características que lo convierten en una infusión especial.
Moviliza las grasas
Y continuamos aún mejor: el té blanco moviliza las grasas acumuladas en células maduras y contribuye a expulsarlas del organismo. Este es lo que en la jerga científica se denomina «efectos anti-obesidad» –que son los que reducen la capacidad de acumular grasa
Beneficios del té blanco para perder peso:
- Acelera el metabolismo, ayudando a quemar calorías y grasas de una forma más rápida.
- Mejora los procesos digestivos.
- Mejora el tránsito intestinal.
- Tiene efecto depurativo.
- Actúa como diurético, estimulando y mejorando la eliminación de líquidos.
- Reduce los depósitos grasos.
- Ayuda a bajar el colesterol y los triglicéridos en sangre.
- Ayuda a evitar la ateroesclerosis.
- Es antioxidante, por su alto contenido en polifenoles, ayudando a contrarrestar el efecto de los radicales libres.
- Tiene efecto antitumoral.
Inhibe la formación de células grasas
Por fortuna, diversos estudios científicos han probado que el consumo regular de té blanco desestimula la producción, y la consiguiente acumulación, de células grasas ,también conocidas como adipocitos
Ayuda a quemar grasa.
Entre los principales beneficios del té blanco está su capacidad para acelerar el metabolismo porque durante su consumo el cuerpo quema con mayor facilidad los lípidos y las grasas, lo que se traduce en pérdida de peso.
Estimula la lipólisis
El consumo de té blanco estimula la lipólisis, que es el nombre técnico que se le confiere al proceso de quema de grasas. En otras palabras, al acelerar la eliminación de las grasas depositadas, el té blanco contribuye a bajar esos kilos de más.
Favorece la digestión.
El té blanco es muy recomendado para las personas estíticas por su capacidad de facilitar el tránsito intestinal. Esta cualidad también convierte al té blanco en depurativo, pues permite que el organismo libere fácilmente toxinas y grasas cumuladas. Además, el té blanco favorece la limpieza y buen funcionamiento de los riñones por su efecto diurético.
Acelera el metabolismo
Esta variedad de té también acelera el ritmo del metabolismo, es decir, del funcionamiento del organismo. Este efecto se traduce indefectiblemente en una quema de grasas más efectiva y en un cuerpo más esbelto y dinámico.
Disminuye el apetito.
Al igual que la mayoría de las infusiones, el té blanco es una excelente bebida para disminuir el apetito, ya que se debe tomar caliente y esto permite generar sensación de saciedad en el organismo.
Obstaculiza la absorción de grasas
El té verde tiene otro efecto magnífico: impide que el organismo absorba grandes cantidades de grasa. Y sin grasas de por medio es mucho más sencillo alcanzar y, sobre todo, preservar un peso saludable.
Es antioxidante.
El té blanco posee casi 100% más cantidad de polifenoles y catequinas que el té verde, lo cual lo convierten en una de las bebidas con mayor cantidad de antioxidantes en la actualidad. Los antioxidantes, además de prevenir la producción de radicales libres, ayudan a prevenir el riesgo de padecer diabetes en personas con sobre peso
Todos estos consejos son solo orientativos y los pacientes con problemas de nutricion deben consultar a un nutricionista o dietista titulado para recibir las indicaciones dietéticas más adecuadas en cada caso. No inicie ninguna dieta no convencional sin consultar previamente con un profesional de la salud.
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