Es increíble lo mucho que los niños aman los fuegos artificiales. Disfrutar de ellos es una de las máximas alegrías en todo tipo de fiestas, sin embargo no hay que olvidar que siguen siendo elementos peligrosos para los niños pequeños. Aquí algunas recomendaciones para la prevención de accidentes con los fuegos artificiales:
- deben ser manejados preferentemente sólo por adultos
- si lo utilizan niños mayores estos deben saber muy bien que no se acercan las bengalas o cualquier otra pirotecnia a las caras de las personas.
- mantener a los niños a una distancia bien alejada de cualquier sitio de lanzamiento
- los bebés pueden tener miedo de los estruendos fuertes e incluso pueden dañar sus oídos por lo que es mejor alejarlos del ruido, por ejemplo entrando en la casa o el coche.
- usar la pirotecnia siempre al aire libre, en lugares despejados de árboles, lejos de las personas y de los animales.
- nunca tenerlos en la mano al encenderlos
- si el producto parece estar dañado no lo utilice.
- no deje que lleven pirotecnia en los bolsillos, puede encenderse sola por el roce y el calor.
- lavarse bien las manos con abundante agua y jabón luego de manipular pirotecnia, ya que esta contienen plomo, azufre o pólvora y en caso de ingerirlos puede producir una intoxicación.
- nunca encender fuegos artificiales en recipientes metálicos ni de vidrio.
- Usarlos al aire libre, en lugares despejados, lejos de las personas y de los animales.
- Evitar que los chicos manipulen fuegos artificiales.
- Cuando se los enciende nunca hay que tenerlos en la mano, hay que dejarlos en el suelo o en los recipientes aconsejados por el fabricante.
- Siempre seguir las instrucciones del producto.
- Si el producto tiene desperfectos en el envoltorio o en la mecha no lo compre, o en caso de darse cuenta tarde, no lo prenda.
- No hay que llevar pirotecnia en los bolsillos. El roce y el calor puede hacerlos explotar.
- Después de usarlos hay que lavarse bien las manos con agua y jabón. Pueden quedar restos de plomo, azufre o pólvora y si se lleva las manos a la boca puede ocasionar una intoxicación.
- Encender petardos dentro de latas o botellas puede producir graves heridas por los fragmentos que explotan. Es muy importante que nuestros hijos también sepan esto.
- Nunca hay que tocar una cañita o un petardo que no haya explotada y parezca haberse apagado.
Igualmente, los bebés pueden tener miedo de los estruendos fuertes e incluso pueden dañar sus oídos por lo que es mejor alejarlos del ruido, por ejemplo entrando en la casa o el coche.
Además, usar la pirotecnia siempre al aire libre, en lugares despejados de árboles, lejos de las personas y de los animales.
Por otro lado, nunca tenerlos en la mano al encenderlos. Si el producto parece estar dañado no lo utilice.
Incluso, no deje que lleven pirotecnia en los bolsillos, puede encenderse sola por el roce y el calor.