La mostaza blanca es una planta originaria del Mediterráneo aunque en la actualidad se la cultiva en diferentes zonas del planeta. El nombre científico es Sinapis alba y pertenece a la familia de las Crucíferas. En las flores hay vainas que son las que contienen las semillas de mostaza que se usan en la gastronomía como condimento y saborizante en comidas. Pero la mostaza blanca también puede usarse para fines terapéuticos ya que tiene propiedades medicinales. Las semillas y las hojas son las que poseen los principios activos y por ende las cualidades medicinales.
Entre los que se destacan como laxante, diurético, antiinflamatorio, digestivo. Es eficaz en el tratamiento de afecciones como amenorrea, dismenorreas, enfermedades respiratorias, dolores reumáticos, estreñimiento, anginas, tos, asma, resfríos, bronquitis, neuralgia, retención de líquidos, congestión pulmonar, inflamación de órganos internos, ciática, lumbago, dolores de espalda, dolores de muelas. Además ayuda a abrir el apetito en casos de inapetencia, afecciones en la garganta, estimula la circulación, para tratar tendinitis y otras inflamaciones. Se puede usar en Cataplasma donde se mezcla el polvo o harina de la mostaza blanca con un poco de agua fría hasta que se forma una pasta y se coloca sobre una tela o gasa y esta se aplica en la zona del cuerpo afectada. Puede tenerse este cataplasma 10 a 20 minutos en el área de la patología y repetir por 2 o 3 días.
Los baños de pies y piernas con la mostaza blanca también son efectivos para algunas afecciones. La otra forma de uso es por vía interno pero es más riesgoso por lo que no se recomienda este uso sin autorización médica. No es recomendable el uso de la mostaza blanca personas con inflamación y molestias de intestino, urinarias y de estomago porque le producirá contraindicaciones. También en algunos casos el externo de la misma puede generar inflamaciones en la piel. La mostaza blanca debe ser usada con moderación y en dosis precisas para que no genere ningún efecto adverso en la salud. No hay automedicarse ni con remedios convencionales ni naturales para evitar problemas de salud siempre se debe consultar al médico antes de usar productos con fines medicinales.