Para las pieles muy grasientas
Se toma una cucharada de hojas. Se le añaden unas gotas de limón y se aplica la mezcla por toda la piel. Después de 20 minutos, se retira y se realiza un lavado con agua fría. Se verán maravillosos resultados.
Para los granos en la cara
La mente puede ayudar a eliminar esos granos tan desagradables que salieron en el rostro. Sólo prepara una mezcla con hojas de menta y avena. Aplícala alrededor de 20 minutos y luego lava con agua bien fría.
Para combatir el acné
Se debe machacar las hojas de menta hasta que se extraiga el zumo. Con ese jugo se frota el rostro, especialmente las áreas afectadas. Se deja actuar durante 30 minutos y se enjuaga con agua muy fría. Se precisa continuar con el uso para que tenga efectos permanentes.
La razón por la cual es tan efectiva la menta es porque contiene propiedades de enfriamiento natural que ayudan a aliviar la hinchazón, el escozor y el enrojecimiento, algo que se asocia con los brotes de acné.
Ingredientes para una mascarilla:
Ingredientes:
- Tres cucharadas de menta o hierbabuena fresca picada
- Tres cucharadas de perejil fresco picado
- Una taza de leche
Preparación:
Para realizar esta mascarilla o loción simplemente debes tomar un recipiente y colocar en él la leche y tanto el perejil como la menta bien picados. Tapa, mezcla y deja reposar en el refrigerador durante unas 12 horas antes de colar.
Para la aplicación, lo ideal es emplearla a la mañana cuando te levantes y también antes de ir a dormir. Simplemente debes embeber un algodón y distribuir la leche sobre tu rostro, dejando actuar 15 minutos antes de retirar con agua tibia.
Baño limpiador de menta: Para prepararlo necesitarás una taza de agua, dos cucharadas de hojas de menta o hierba buena picadas, una cucharada de extracto de pepino, una cucharadita de bicarbonato, dos cucharaditas de miel (no las añadas si tu piel es grasa) y dos cucharaditas de extracto de almendras.
Comienza poniendo el agua a hervir y cuando rompa el hervor añade la menta, apaga el fuego y deja que la infusión repose durante unos diez minutos. Cuando se enfríe cuela la preparación resultante y añade el resto de los ingredientes al té. Añádelo al agua de la bañera o utilízalo como un jabón líquido. Recuerda darte una ducha con agua fresca antes de salir para cerrar los poros que se habrán abierto con el calor del agua. Debes usarlo inmediatamente, ya que pierde su aroma en un par de días.
– Baño de menta y vinagre: Necesitas dos litros de agua, medio litro de vinagre de manzana y un buen puñado de hojas de menta o hierbabuena. Pon el agua a hervir con las hojas de menta y cuando hierva déjalo reposar durante cinco minutos. Cuela la preparación y después mezcla el agua con el vinagre, dejando que repose la mezcla durante unos días antes de utilizarla. Cuando te prepares el baño añade medio litro de esta preparación en la bañera.