Con los calores tan cerquita muchas personas comienzan a hacer dietas y cambian su alimentación para poder bajar esos kilos de más que fueron acumulando. Sin embargo, muchas veces esto no funciona, hoy vamos a contarte cuáles son algunos errores que suelen cometerse que no nos permiten bajar de peso, ¡presta mucha atención!
Hay algunas acciones que pueden hacer que la dieta que estamos siguiendo no de frutos, una de estas acciones es por ejemplo, el uso de la sal. La misma aumenta el sodio en nuestra sangre, lo cual aumenta la presión sanguínea y puede dar lugar a trastornos circulatorios. Esto último nos lleva a tener retención de líquidos y un incremento del volumen corporal.
Otro factor a tener en cuenta son las grasas, por lo general evitamos por completo consumirlas, lo cual también incluye a las poliinsaturadas, un gran error. Estas últimas son fundamentales para que nuestro organismo funcione como es debido, debemos consumirlas de forma moderada. Las mismas se encuentran en alimentos como el aceite de oliva y los frutos secos.
Saltarse comidas
Todas sabemos que para que un plan alimenticio funcione debemos comer 5 veces al día. Saltarte cualquier comida es un mal hábito, y saltarte el desayuno es el peor. Si realmente quieres hacer algo por tu cuerpo debes fijarte en lo que comes, mantener los mismos horarios, y planear tus comidas. Si sabes que vas a tener un día pesado en la oficina, ¡lleva un snack! Si vas a salir muy temprano por la mañana y no te dará tiempo de cocinarte un buen desayuno, deja un sándwich preparado la noche anterior. Recuerda que eres tú quien tiene que cuidarse, y eso implica algunos sacrificios por un bien mayor. Chicas, aunque no tengan hambre, no se salten ninguna comida, es súper importante para mantener una alimentación adecuada.
Distracciones
Otro mal hábito alimenticio es comer cuando estamos distraídas. Comer frente a la computadora o la televisión, mientras trabajamos o cuando ayudamos a los niños a hacer la tarea es terrible porque tu cerebro no registra que estás comiendo, y la sensación de saciedad tarda mucho más en llegar.
Comer directo del envase
Si eres de las chicas que come directamente de la bolsa, tienes un problema. Si metes la mano para sacar papitas, cacahuates, e incluso fruta, no puedes medir tus porciones y no te estás dando cuenta de cuánto estás comiendo. Sírvete en un plato lo que consideres prudente comer, y deja la bolsa bien cerrada.
Comer en el auto
Este punto tiene que ver con las distracciones. Uno de los peores hábitos alimenticios es comer mientras nos estamos trasladando. Entendemos que hay ocasiones en que no tienes opción, o comes en el auto o te saltas la comida y ni modo. Pero trata de comer antes de salir, para que tu cerebro registre la idea de que estás consumiendo alimentos.
Antojos de media noche
Un hábito terrible que tenemos muchas mujeres es comer antes de irnos a la cama, o peor, ¡levantarnos de la cama para comer! Si ya cenaste, olvídalo. Las primeras noches pasarás un poco de hambre, pero después tu cuerpo estará acostumbrado y tendrás más ganas de desayunar, que es el alimento más importante.
Comer con sentimientos
Seguro saben de lo que estamos hablando… cuando cortamos, nos peleamos, nos estresamos, comemos. Y por lo general, no son alimentos saludables. Cuando estamos tristes queremos azúcar, y cuando estamos estresados queremos grasa, el terror de las dietas. Antes de llevarte cualquier alimento a la boca analiza por qué lo estás haciendo. Si vas a comer por hambre, o porque te toca tu snack de media mañana, adelante. Si vas a comer por emociones, piénsalo 2 veces.
Competir a la hora de la comida
Por alguna extraña razón, muchas mujeres nos sentimos mal de ser las últimas en terminar cuando comemos acompañadas y engullimos los alimentos como si fuera una carrera olímpica. ¡Alto! No vas a sacar medalla por terminar antes, al contrario, vas a sacar varios kilos adicionales que puedes evitar si comes despacio, masticas bien, bajas el tenedor entre bocado y bocado y tomas suficiente agua antes y después de los alimentos.
Por último, para lograr buenos resultados es fundamental incorporar fibra en la alimentación, esto significa alimentarnos con productos integrales, frutas y verduras. Hay quienes los evitan porque dicen que estos alimentos hinchan, sin embargo, esto solo sucede los primeros días, cuando el cuerpo se acostumbra la fibra tiene el efecto contrario y nos ayuda a agilizar la digestión.
10 hábitos que engordan sin comer
- Dormir mal: Trasnochar hace que pierdas la noción del tiempo y la cantidad de comida que ingieres. Además se produce un desequilibrio hormonal que afecta a la saciedad.
- Ansiedad: La ansiedad estimula las ganas de comer alimentos dulces y con grasa. Para evitar que esto suceda, es importante tener a mano unbotiquín de emergencia.
- Estrés: El estrés genera un desequilibrio hormonal que provoca un aumento de peso. Por eso es importante la relajación y la actividad física.
- Dejar de fumar: Si bien dejar de fumar es una decisión muy importante y saludable, es necesario que tengas presente que al hacerlo tendrás momentos de gran ansiedad. Por eso debes estar preparado y planificar muy bien tus comidas.
- Falta de actividad física: El sedentarismo provoca un menor gasto calórico y un mayor depósito de grasas.
- Exceso de consumo de sal: El consumo excesivo de sal puede generar retención de líquido y por lo tanto aumento de peso.
- Saltearse comidas: Si te salteas comida, lo único que vas a lograr es que tu metabolismo se vuelva más lento. La ingesta de comida cada 3 horas es importante para mantener equilibrado el metabolismo.
- Comer rápido: Comer a las apuradas reduce la sensación de saciedad lo que genera más necesidad de comer.
- Tomar poco líquido: Al consumir poca cantidad de agua, se produce una retención de toxinas que pueden generar sobrepeso.
- Comer poca fibra: Los alimentos con fibra, son alimentos que generan saciedad, aportan pocas calorías y muchos antioxidantes que mejoran el metabolismo.
Todos estos hábitos pueden influir en la efectividad de una dieta e incluso pueden provocar un aumento de peso. Por ello es importante considerar a una dieta para adelgazar como un tratamiento integral. Cuantas más variables tengas presentes, más probabilidades de adelgazar tendrás.
Todos estos consejos son solo orientativos y los pacientes con problemas de nutricion deben consultar a un nutricionista o dietista titulado para recibir las indicaciones dietéticas más adecuadas en cada caso. No inicie ninguna dieta no convencional sin consultar previamente con un profesional de la salud.
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